Obama anuncia «decisiones difíciles» para hacer frente a un déficit público histórico
«Es hora de ahorrar». Las palabras del presidente de EEUU son elocuentes. Barack Obama presentó ayer el presupuesto para 2011 que prevé la congelación de un 17% de las partidas para hacer frente al déficit.
GARA | WASHINGTON
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, presenta ayer su propuesta presupuestaria para el año fiscal 2011, que se eleva a 3,8 billones de dólares y prevé un déficit de casi 1,3 billones de dólares a pesar de la congelación de varios programas públicod para intentar reducirlo. Aun así, la Casa Blanca insistió en que el déficit proyectado para el próximo ejercicio, que equivaldrá al 8,3% del Producto Interior Bruto (PIB), será inferior a los casi 1,6 billones previstos para el año fiscal 2010, equivalente al 10,6% del PIB.
Desde el Gabinete del mandatario norteamericano advirtieron, en cualquier caso, que aunque su prioridad durante 2011 será la creación de empleo, se tomarán «decisiones difíciles» que coloquen al país en la senda de la «responsabilidad fiscal».
El propio Obama manifestó, acompañado de sus principales asesores económicos, que «es hora de ahorrar» porque, argumentó, «no podemos gastar como si los déficit no tuvieran consecuencias».
El plan presupuestario, que establece la congelación de aproximadamente un 17% de las partidas públicas, marca un cambio en la trayectoria de la Casa Blanca, que hasta ahora había destacado la necesidad de superar la crisis con medidas de estímulo económico y dejar los déficit como un problema secundario. También pone fin a las reducciones impositivas temporales para las personas con mayores ingresos que fueron aprobadas durante los mandatos de George W. Bush. «Simplemente, no nos lo podemos permtir», señaló Obama.
Defensa y agencia espacial
A los que no afectarán los recortes presupuestarios serán los gastos de Defensa, que subirán un 3%, y los fondos para el Departamento de Estado, con un 2,6% más, sin contar los costes atribuidos a las guerras. El Departamento de Seguridad Nacional, que incluye a la mayor parte de las agencias de espionaje estadounidenses, también recibirá un aumento del 2%, hasta los 43.600 millones de dólares. En el mismo lote se incluye una inversión de 734 millones destinados al desarrollo de mil escáneres para detectar explosivos en los aeropuertos.
No tendrá la misma suerte la agencia espacial estadounidense (NASA) que, si bien tendrá un mayor presupuesto que este año, deberá eliminar sus planes para enviar misiones tripuladas a la Luna antes de 2020, dentro del programa Constellation.