La Fiscalía de los Juzgados de Iruñea mantuvo ayer la petición de año y medio de cárcel contra el joven Israel González, juzgado por participar en las movilizaciones convocadas con motivo de la jornada de huelga general del 21 de mayo.

Coincidiendo con el inicio del juicio, un centenar de delegados de ELA, LAB, ESK, STEE-EILAS, EHNE e Hiru se concentraron frente a la sede judicial para denunciar la «represión sindical» ejercida, en este caso, por el Ayuntamiento de Iruñea a través de la Policía Municipal.

Preocupación institucional

Los delegados sindicales denunciaron que las acusaciones contra este trabajador constituyen «un intento de ir contra el derecho a manifestarse y el derecho a la huelga». Asimismo, valoraron que este tipo de denuncias ponen de manifiesto la preocupación de las instituciones públicas ante «la reacción tan multitudinaria que tuvo la clase trabajadora ese día».

También explicaron que se ha producido, con sentencia firme, una anulación de los servicios mínimos que el Gobierno de Miguel Sanz impuso en la jornada de huelga general.