Tolosa recuerda a Lopetegi veintidós años después de aparecer muerto en su celda
GARA |
Alrededor de ochenta personas se acercaron el domingo hasta el barrio tolosarra de Urkizu para rendirle homenaje a Mikel Lopetegi en el vigesimosegundo aniversario de su muerte. Lopetegi apareció muerto en una celda de la prisión de Herrera de la Mancha, concretamente el 2 de marzo de 1988.
Los bertsolaris arrancaron el homenaje, mientras que los dantzaris dedicaron a Lopetegi el aurresku de honor. También se llevó a cabo una ofrenda foral frente al monolito levantado en memoria de Mikel Lopetegi.
Acto seguido, miembros del movimiento pro-amnistía hicieron una lectura política. Desde el movimiento antirrepresivo recordaron que, como cada año, se reunieron en el barrio de Urkizu para homenajear a Lopetegi 22 años después de que la «cruel política penitenciaria que hoy en día sigue vigente» acabara con su vida.
«Laboratorio represivo»
Asimismo, el movimiento pro-amnistía definió la actual política penitenciaria como un «laboratorio represivo». «Se trata de un laboratorio donde miden y prueban nuevas medidas represivas», censuraron. No obstante, animaron a la ciudadanía a seguir hacia adelante mediante la «dignidad y la denuncia».
Por otro lado, ayer, como cada lunes, se repitieron las protestas y movilizaciones en defensa de los derechos de los presos y refugiados políticos vascos.
En Pasaia San Pedro se concentraron 25 personas; en Ondarroa fueron 71; en Iurreta se movilizaron 57; otras 20 personas en Ataun; 12 en Euba; 70 en Santurtzi; 43 en Laudio; 18 en Otxarkoaga y Zorrotza; 15 en Añorga; 22 en Ordizia; 43 en Oiartzun, y otras 21 personas en el barrio donostiarra de Altza.