CHAMPIONS LEAGUE Vuelta de los octavos de final
El Lyon supera su prueba de madurez y hunde al Madrid
Cristiano Ronaldo adelantó a los blancos, pero el joven Pjanic empató la contienda y clasificó a los galos.
Beñat ZARRABEITIA
El Olympique de Lyon pasó anoche, por fin, el test de madurez que su presidente Jean Michel Aulas había soñado durante tantas campañas en Europa. Lo hizo a costa de apear a un impotente Real Madrid en el mismísimo Santiago Bernabéu. El coliseo merengue acogerá la final de la competición el próximo mes de mayo y sobre la capital española ya sobrevuela el fantasma de que el Barcelona pueda presentarse en la misma.
La eliminación de los blancos, además, invita a varias reflexiones. La primera, que no es casualidad que el gigante blanco haya caído durante seis temporadas consecutivas en los octavos de final. Seis proyectos distitos, infinidad de entrenadores, futbolistas y millones de euros gastados en busca de «la décima» han sido dilapidados un año tras otro. Con el retorno de Florentino Pérez, la afición madridista ansiaba volver a la senda del éxito europeo. De hecho, el presidente blanco había afirmado que «la Champions forma parte del ADN» madridista. Por lo visto, la cadena ha sufrido una evidente alteración.
Hace más de una década, una conocida marca de coches parodiaba la entonces impotencia merengue en Europa -el Madrid acumuló 32 años sin ganar la «orejona»- con una frase en la que un habitante de un pueblo aislado de la vida moderna preguntaba eso de «y qué, ¿el Madrid otra vez campeón de Europa?». La broma puede volver a estar en boca de todos. Más, cuando los blancos se han gastado más de 250 millones de euros en conformar su plantilla.
El futuro de Pellegrini
La siguiente lectura de la situación es que Pellegrini parece tener los meses contados en la casa blanca. El técnico chileno ha conseguido colocar a su equipo como líder de la Liga, pero el desastre ante el Alcorcón en Copa y la eliminación de anoche pesan demasiado en su debe. Junto a ello, los silbidos que recibió por sustituir a Kaká tampoco le hacen ningún bien. En cambio, su colega Claude Puel salió reforzado tras la cita del Bernabéu. El francés dio un golpe de timón en el descanso y varió el rumbo del partido.
La decisión de introducir a Kallstrom y Gonalons fue un acierto táctico de primer orden. El Lyon logró coger el pulso al partido y se sobrepuso a una mala primera mitad. CR9 adelantó a los blancos en los primeros minutos y el Madrid contó con una batería de ocasiones falladas por Higuaín. En la más clara, envió la pelota al palo.
Tras la reanudación, los galos mejoraron de forma ostensible y consiguió empatar gracias al bosnio Miralem Pjanic. Un futbolista de apenas 19 años, que creció en Luxemburgo debido al exilio de sus padres durante la guerra, y que se ha confirmado como una de las grandes promesas del fútbol continental.
A partir de ahí, Pellegrini pensó en Raúl y en la épica. En balde, ya que fue el Lyon quien gozó de las mejores ocasiones para sentenciar en las botas de César Delgado y Lisandro López. Ambos acabaron disparando fuera de portería.
Es el futbolista del momento. Con los dos goles que consiguió anoche, Wayne Rooney ya acumula un total de 30 tantos en lo que va de curso. Es la gran baza del United en Liga y Champions y la de los «pross» en Sudáfrica.
Casi siete años después de su salida de Old Trafford, David Beckham regresó ayer por primera vez al campo de los «red devils». El inglés, que saltó en la segunda parte, fue recibido con una sonora ovación por su antiguo público.
El Milan cerró anoche un exitoso ciclo en el «Teatro de los Sueños». Un escenario donde siete años antes los Pirlo, Gattuso, Seedorf o Inzaghi se habían proclamado campeones de Europa ante la Juve. Cuatro cursos más tarde, repitieron en Estambul. Sin embargo, la edad no perdona y ayer fueron superados por el Manchester United de Wayne Rooney. Magistralmente dirigidos por Sir Alex Ferguson, los red devils se han sobrepuesto a la marcha de Cristiano Ronaldo y a las críticas de los hinchas a la gestión de los propietarios de la entidad para seguir ganando.
En el cuatro a cero de ayer, el excepcional estado de forma de Rooney -el futbolista más determinante del fútbol mundial en estos instantes- volvió a ser la punta de lanza de su escuadra.
El delantero inglés, duda hasta última hora, anotó los dos primeros tantos de su equipo y certificó la clasificación del United. El intermitente Park hizo el tercero, mientras que Fletcher cerró la goleada. El escocés se ha convertido en la extensión de su compatriota Ferguson sobre el césped y en una de las piezas clave de los red devils. B.Z.
