Obama quita hierro al malestar con Israel y evita hablar de crisis
El presidente estadounidense, Barack Obama, trató de quitar importancia al enfrentamiento que mantiene con Israel por su decisión de ampliar las colonias sionistas, evitando calificarlo de crisis y destacando que para Washington la seguridad de Israel es una prioridad. Así, el enviado especial de EEUU, George Mitchell, regresará a Oriente Próximo tras un retraso de su visita. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, acudirá a la convención del lobby sionista de EEUU.
GARA
El presidente de EEUU, Barack Obama, calificó ayer de peligrosos los planes israelíes de construir 1.600 viviendas en la ilegal colonia sionista de Ramat Shlomo, en Jerusalén Este, pero reiteró que las relaciones con Israel no están en crisis.
«Creo que las construcción de nuevos asentamientos no ayuda a la seguridad de Israel. Pienso que dificulta la paz con sus vecinos. Disgusta a los palestinos de una forma que podría terminar siendo peligrosa», dijo Obama en una entrevista para la cadena de televisón Fox News.
«La situación en Oriente Medio es muy difícil y lo he dicho reiteradamente y lo vuelvo a decir: la seguridad de Israel es de interés vital para EEUU y seguiremos garantizando su seguridad», manifestó Obama.
«En algunas ocasiones los amigos tienen discrepancias», manifestó.
Las relaciones entre EEUU e Israel se encuentran en uno de sus peores momentos desde hace décadas, después de que el Estado sionista anunciara, en plena visita del vicepresidente de EEUU, Joe Biden, que continuará ampliando las colonias sionistas ilegales a pesar de que Obama les había requerido expresa y reiteradamente a que dejaran de hacerlo.
Estas palabras de Obama coincidieron con el anuncio de que su enviado especial a Oriente Medio, George Mitchell, regresará a esta región el domingo, después de haber pospuesto su viaje debido a la crisis de las colonias, según informó ayer a Reuters una fuente oficial palestina.
«Los estadounidenses nos han dicho que vendrá el domingo», aseguró la fuente, que añadió que el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, se reunirá con Mitchell durante la visita. Se esperaba que el viaje del enviado estadounidense ayudase a promover las conversaciones indirectas entre la Autoridad Palestina e Israel, pero luego surgieron dudas por la reacción palestina a la ampliación de las colonias.
La oficina del ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, dijo que éste habló por teléfono con Mitchell el miércoles. «Hablaron de las distintas formas y posibilidades de resolver la crisis y activar las negociaciones entre Israel y los palestinos», destacó la oficina de Barak.
Netanyahu, a EEUU
Mitchell podría reunirse el domingo con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien, a su vez, iniciará posteriormente una visita a EEUU, según informó ayer el diario «Tedioth Aharonot».
Netanyahu participará en la convención anual del lobby sionista estadounidense (Aipac).
Por otra parte, los componentes del Cuarteto para la Paz en Oriente Medio (EEUU, la UE, la ONU y Rusia) se reunirán hoy en Moscú para tratar sobre las negociaciones indirectas.
El Departamento del Tesoro de EEUU anunció ayer que congela los haberes de la televisión de Hamas, Al-Aqsa TV, así como los de un banco de Gaza controlado, según Washington, por el movimiento islamista palestino.
Un cohete lanzado desde Gaza mató ayer a un inmigrante de nacionalidad tailandesa que trabajaba en un kibbutz [granja colectiva] en el norte del desierto del Negev, en territorio israelí. Horas después, el Estado sionista prometía que la respuesta sería dura.
La agencia palestina Ma'an informó de que se registraron docenas de explosiones en Gaza tras el vuelo rasante de aviones israelíes, aunque no tenían constancia de que hubieran provocado daños personales.
«Se ha pasado la línea roja», advirtió el viceministro israelí de Defensa, Matan Vilnai, tras recordar que es el primer ataque mortal desde la matanza israelí en Gaza de diciembre de 2008 y enero de 2009.
El lanzamiento lo reivindicaron las Brigadas Ansar al-Sunna -vinculadas a Al-Qaeda y contra las que combate Hamas-, pero Vilnai responsabilizó a la formación que gobierna en Gaza porque el lanzamiento se produjo desde este territorio. Las Brigadas de los Mártires de Al-Aqsa, vinculadas a Al-Fatah, también lo reivindicaron.
Un segundo cohete impactó por la noche en una zona no habitada de Eshkol, sin provocar daños.
El ataque coincidió con la visita a Gaza de la responsable de política exterior de la UE, Catherine Ashton, en su primer viaje a la región desde que entró en funciones en diciembre. GARA