El «Boletín Económico» del Banco de España (BDE), referido a marzo, confirma que los «resultados atípicos» de las empresas financieras permitieron a las mismas terminar con un resultado positivo en 2009, ya que elevaron los resultados en un 20,8% en relación al conjunto del negocio.

Este porcentaje es mayor que el 16,8% de 2008, aunque lejos del 38,1% del ejercicio histórico de 2007. El resultado neto ordinario del ejercicio bajó un 10,3%, la mitad que un año antes, pero este parámetro no tiene en cuenta el valor total de la producción. A la vez, las empresas redujeron en un 28,7% los gastos financieros, por los bajos tipos de interés

Más paro

A la vez que el BDE ofrecía unos resultados positivos de las empresas, aunque señala que el año pasado se produjo en general «una fuerte contracción de la actividad productiva, sobre todo, en el sector industrial ligado a bienes de equipo», el informe señala que el paro irá en ascenso en 2010 y en 2011, del 19,4% al 19,7% en la tasa para el conjunto del Estado español.

Por ese motivo, el Banco de España que dirige el gobernador Miguel Angel Fernández Ordoñez, propuso la introducción de una nueva figura contractual «con un coste de despido inferior al del indefinido, con el objetivo de aumentar la creación de empleo». La vicepresidenta primera española, María Teresa Fernández de la Vega, desmintió ayer, tras el Consejo de Ministros, que el Ejecutivo español busque abaratar el despido.

Empleo temporal

Llama la atención, sin embargo, la elevada presión que está ejerciendo el Banco de España a favor de los empresarios teniendo en cuenta, como indica el informe sobre las empresas no financieras, que los gastos de personal descendieron en un 1,6% el año pasado «debido al menor crecimiento de las remuneraciones medias, como especialmente a la reducción del número medio de empleados que hubo en activo, que en 2009 bajó en un 2,7% de media».

El cálculo que estima el Banco de España en su informe económico indica que el 62,12% de las empresas se deshizo de trabajadores, sobre todo temporales. Así, determina que la reducción de las plantillas se cebó en un 15,1% en el empleo temporal y en un 0,4% en el empleo fijo. Por lo tanto, no parece que hay una concordancia muy directa entre un planteamiento de un despido más barato y rápido, y el efecto real que se ha producido en el mercado de trabajo en 2009 a no ser que el Banco de España esté actuando de una manera deliberada para conseguir que los empresarios logren mayores beneficios económicos, beneficiándose de una desregulación.