Ayer fue jornada de luto oficial en Eibar tras el fallecimiento de cuatro jóvenes a consecuencia del accidente de tráfico registrado en la N-634, en Elgoibar, cuando regresaban a casa el pasado jueves. La bandera de la localidad ondeó a media asta en la casa consistorial.

Lidia Fernández, Eider Escribano e Izaro Martínez fueron enterradas ayer tras un multitudinario funeral conjunto que tuvo lugar en la parroquia de San Andrés Apóstol, donde a continuación se celebró el de la joven Marta Guenaga, que falleció el pasado domingo en un atropello en Essaouira (Marruecos), en el que también murió Iñaki Beunza, vecino de Iruñea.

El cuerpo de Jonathan Martínez, de 20 años, que conducía el turismo accidentado en Elgoibar, será incinerado mañana y su familia lo despedirá con una ceremonia civil.

El alcalde de Eibar, Miguel de los Toyos, aseguró ayer que «todo el mundo está completamente hundido» en la villa armera. También destacó que el duelo se está viviendo «muy mal» y que lo que corresponde hacer en este momento desde la Corporación municipal es «tender la mano a la familia».