Vuelta a Castilla y León
Igor Antón se apunta a la primavera naranja
El vizcaino se impuso en Alto del Morredero y es el nuevo líder de la prueba.
GARA | BILBO
Costó arrancar, pero Euskaltel- Euskadi lleva camino de protagonizar una primavera memorable. Igor Antón tomó ayer el relevo de Samuel Sánchez o Beñat Intxausti, prolongando el momento dulce de su equipo, al adjudicarse en solitario la etapa reina de la Vuelta a Castilla y León; victoria que, además, le convierte en líder de la prueba.
Un triunfo que, por otra parte, gana prestigio por la entidad de los rivales -el vizcaino se marchó de Mauricio Soler y Alberto Contador, vencedor de las dos últimas ediciones de la carrera y máximo favorito- y refuerza el sentido colectivo del éxito. Euskaltel compartió responsabilidad con Astana -y protagonismo con un Orbea muy peleón-, pero con mayor presencia y, evidentemente, mejor resolución.
Los despacibles 158 kilómetros entre León y el Alto del Morredero arrancaron con un pelotón vigilante, que apenas dio cuerda a la primera fuga del día, un quinteto en el que se colaron Ricardo García y Javier Aramendia. Jorge Azanza tomó el relevo de su compañero tras el descenso de Foncebadón, marchándose en solitario y obligando a Astana a trabajar sin ayudas. Cazado el corredor de Euskaltel, llegó el turno de Andoni Blázquez, Michael Kwiatkowski y, posteriormente, Mikel Landa.
Pero la carrera ya afrontaba las primeras rampas del Morredero. Era el turno de los primeros espadas. Ezequiel Mosquera abrió fuego, pero Igor Antón, Alberto Contador, Thiago Machado y, posteriormente, Mauricio Soler, se pegaron a sus talones. Con Contador ejerciendo de capo, consciente de que la contrarreloj de Ponferrada le sonríe, Antón y Mosquera alternaron los hachazos. El definitivo lo dio, con más de 150 kilómetros de frío, lluvia y viento encima -e incluso nieve en las cunetas-, el vizcaino. Arrancó con decisión y sin mirar atrás y encontró el premio 2.000 metros más adelante, al cruzar en solitario la línea de meta.
Con trece segundos sobre Soler, Contador y Mosquera, y más de veinte minutos sobre el pelotón de sprinters en el que viajava Theo Bos, el corredor de Euskaltel obtuvo la recompensa añadida de enfundarse el maillot de líder. Premio, en principio, efímero, porque la ventaja mínima y los quince kilómetros contra el crono que deben disputar hoy los corredores mantienen a Contador como principal candidato al triunfo final.
Mejor lo tiene Iban Mayoz para adjudicarse el premio de la montaña, después de que ayer aumentase su ventaja.
«Una gran satisfacción». Es lo que supuso el triunfo para Igor Antón. No sólo por la victoria en sí, sino también porque llega tras un 2009 «en el que las cosas no me salieron como me hubieran gustado», porque lo consiguió «ante rivales de auténtica categoría» o porque premiaba «la gran labor de los compañeros».
También porque «las oportunidades de ganar suelen ser pocas y hay que aprovecharlas», reconoció el vizcaino, contento por haber «sabido jugar mis cartas. He tenido sangre fría, he atacado para ganar y he sacado todo lo que llevo dentro», explicó Antón, que reconoció no haber «pensado mucho en la general». GARA