El ministro para la Simplificación de Leyes, Roberto Calderoli, de la Liga Norte, ha abierto una nueva polémica en Italia al afirmar que la celebración de los 150 años de la unidad del país no tiene mucho sentido, provocando ayer la ira del ex primer ministro Giulio Andreotti, informó AFP.

«Es mejor encontrar soluciones (a los problemas), no es suficiente agitar la bandera y es inútil hablar de un tótem a sabiendas de que existen diferencias en el seno del país» entre el norte y el sur, declaró el ministro.

El opositor Partito Democratico calificó esas declaraciones de «desconcertantes» y consideró que un ministro no puede permitirse ese comportamiento».

Giulio Andreotti, por su parte, señaló que «celebrar la unidad es un deber, no una opción».