Osasuna está obligado a realizar un nuevo ejercicio de fortaleza mental después del enésimo varapalo en el último tramo de un encuentro. La diferencia con respecto al resto de ocasiones es que ahora el esfuerzo va a ser definitivo. Si los rojillos consiguen sobreponerse a lo suce dido en el Bernabéu y sacar fuerzas de flaqueza ante el Deportivo, tienen muchas opciones de alcanzar su objetivo de estar un año más en la máxima categoría futbolística.

El premio es suculento, meritorio si nos atenemos a los recientes precedentes y factible a tenor de cómo va a llegar el rival a Iruñea. Encima, si se dan una serie de condicionantes más que posibles, la meta se habrá conseguido de manera aritmética. Sólo falta ese último empujón que haga bueno el trabajo de toda una temporada.

Porque si Osasuna consigue imponerse a un Deportivo en tierra de nadie al haberse ido desinflando a medida que avanzaba la competición y uno de los dos conjuntos de la parte baja de la tabla -Málaga y Tenerife- pierde, los dirigidos por Camacho certificarían matemáti- camente su continuidad en la Primera División.

Y el logro es perfectamente posible, dado que los rojillos se enfrentan a un contrario en principio desmotivado y sin ningún objetivo en ciernes, y tanto andaluces como isleños tienen inminentes difíciles compromisos. En especial los tinerfeños, que deben rendir visita al Camp Nou, donde el Barcelona se juega el seguir manteniendo a raya al Real Madrid.

Además, la escuadra navarra contará con la ventaja de saber de antemano lo que han hecho los de Oltra, pues estos últimos juegan hoy en el estadio culé a las 20.00. Caso de que se diera la sorpresa mayúscula de que los chicharreros puntuasen en el feudo azulgrana, quien podría echarle una mano a Osasuna sería la otra escuadra vasca.

El Athletic se mide al Málaga en San Mamés al mismo tiempo que se disputa el choque de El Sadar y, si bien ya se juegan suficiente los rojiblancos con vistas a entrar en Europa y tras el tropiezo casero del pasado domingo contra el Mallorca, una victoria de los de Caparrós ayudaría de rebote a los rojillos.

Roversio y Sergio pueden estar

La resaca merengue no sólo trajo consigo la pesadilla de última hora del gol de Cristiano Ronaldo, sino una pléyade de tocados, consecuencia del gran desgaste físico del que hizo gala el conjunto navarro sobre el césped del Bernabéu. Roversio y Aranda tuvieron que ser sustituidos, y Sergio también acabó con molestias musculares.

Sin embargo, la dupla de centrales no está descartada para el encuentro de mañana. Ayer por la tarde se les sometió a ambos a sendas resonancias magnéticas, que les hacen ser dudas, pero no bajas para medirse al Deportivo. El brasileño tiene una tendinopatía en su rodilla izquierda, mientras que el astuariano sufre una elongación del gemelo interno de su pierna derecha. No debe preocupar, en cualquier caso, tal circunstancia, ya que podrían ser sustituidos con garantías por Josetxo y Miguel Flaño.

En cuanto a Aranda, el malagueño sufre una sobrecarga en el adductor izquierdo, dolencia habitual en él cuando participa en un partido con notable exigencia física.