Mujeres magrebíes residentes en Gasteiz, el movimiento feminista y una buena representación del movimiento social y sindical de la ciudad denunciaron que «el silencio total de la sociedad no se produciría si Nora no fuera migrante».

Rabía Oulkhir, en representación de la Asociación de Mujeres Árabes en la CAV, señaló que han tenido la ocasión de permanecer con el padre de Nora, que se encuentra en Gasteiz para solicitar información en torno a la investigación.

Oulkhir recordó que Nora desapareció, hace ya siete meses, tras haber vuelto del albergue donde residía con sus hijos al piso de su marido, y señaló que éste no denunció la desaparición hasta tres días después de haberse producido. Asimismo, destacó que, pese a que el marido fue detenido en un primer momento, salió días más tarde en libertad vigilada.

Los colectivos que comparecieron ayer evidenciaron que las mujeres migrantes «se encuentran invisibilizadas en la sociedad», y se solidarizaron con algunas mujeres magrebíes movilizadas en la lucha por Nora que están siendo amenazadas por parte de algunos hombres de su comunidad. Hoy a las 20.00, en la Virgen Blanca, habrá una nueva concentración.