N-VA se reúne con el rey para iniciar los trámites para la formación de Gobierno
Los independentistas flamencos de N-VA mostraron ayer su disposición a formar el nuevo Gobierno belga que impulse las reformas para aumentar el autogobierno que Flandes reclama acudiendo al Palacio Real de Bruselas a entrevistarse con Alberto II.GARA |
El Palacio Real belga fue ayer el escenario de un encuentro poco habitual entre el rey Alberto II y el vencedor de las elecciones del domingo, el independentista flamenco y antimonárquico declarado Bart de Wever.
A la cabeza de N-VA, convertida el domingo en la más importante formación de Bélgica con 27 diputados de un total de 150, De Wever es el político del momento en Flandes.
Fue el primer presidente la formación independentista flamenca en franquear las puertas del Palacio de Laeken, según un breve comunicado del Palacio Real. Llegó sin corbata, algo poco habitual en De Wever.
Tras el líder de N-VA acudió al Palacio Real de Bruselas el presidente del Partido Socialista (PS) valón, Elio di Rupo, vencedor en la comunidad con 26 escaños, a quien algunos medios presentan como el futuro primer ministro.
En el pasado, De Wever se había manifestado claramente contra la monarquía belga. «Se puede constatar que en la historia, los Sajonia-Coburgo [fundadores de la monarquía belga en 1831] han estado en contra de cada movimiento de emancipación: emancipación flamenca, social, obrera, ética... Siempre han estado en contra. No veo la razón por la que van a ser mis amigos», declaró hace meses a la televisión RTBF.
Al día siguiente de su victoria, se manifestó dispuesto a acudir a la cita con el monarca. «El rey es el Jefe del Estado y es quien convoca a los partidos y nombra a un mediador», declaró De Wever. En cualquier caso, añadió que iba a explicar a Alberto II su visión de las cosas.
«Somos conscientes de la responsabilidad que tenemos como partido. Queremos ponernos a trabajar lo antes posible para tener estructuras que funcionen», explicó.
El N-VA reclama la independencia de Flandes, pero propone un paso intermedio, el confederalismo, en el que Flandes y Valonia tendrán una amplia autonomía.
Aunque no hay ningún obstáculo para que De Wever pueda ser designada como formador del Gobierno, ya que N-VA está considerado como una formación democrática -a diferencia del ultraderechista Vlaams Belang-, los analistas consideran que el Palacio Real baraja la posibilidad de encargar la formación del Ejecutivo a Di Rupo, que, de conseguir su objetivo, podría convertirse en el primer valón que dirige el Gobierno belga desde la década de 1970.
De todos modos, las negociaciones para formar Gobierno se presentan complicadas ante la fragmentación del Parlamento.
El ministro belga de Finanzas, Didier Reynders, anunció que abandonará el liderazgo de su partido, el liberal MR, que se ha visto superado en Valonia por el PS de Elio di Rupo tras bajar de 23 escaños a 18.