GARA > Idatzia > Iritzia> Txokotik

Imanol Intziarte Periodista

Por el derecho a hacer el ridículo

La pelotita gira en torno a la pelotita, que es otro modo de decir que aquí andamos, pegados todo el día a la caja tonta tragándonos uno tras otro los partidos del Mundial de fútbol. De calidad mejor no hablamos, ya dijo algún entrenador que el que quiera espectáculo mejor si se va al circo. Lo que falta por ese lado lo vemos recompensado con creces en emoción, sobre todo cuando se juegan ya encuentros «a vida o muerte». Qué gran frase hecha.

Caen dos grandes como Francia e Italia, finalistas hace cuatro años, y por estos lares nos partimos de risa viendo la cera que les dan sus medios de comunicación y cómo una eliminación deportiva se convierte en cuestión de Estado. Lo mismo le puede suceder esta noche a la vigente campeona de Europa, y ya sabemos cómo se las gasta la prensa española para la que sólo existe el blanco o el negro, sin término medio. El martillo y los clavos están listos para la crucifixión de Del Bosque.

Y aquí andamos nosotros, lamiéndonos una vez más las heridas y suspirando por el año en que nuestra selección esté presente en un evento de esa magnitud. Va a ser el acabose, porque por mucho que aquí nos creamos muchas veces más guapos, más altos y más listos, cojeamos de la misma pata que el resto de los mortales.

Así que no me cabe ninguna duda de que el combinado nacional de fútbol de Euskal Herria, cuando juegue partidos oficiales, tendrá cerca de tres millones de seleccionadores que discutirán todas y cada una de las decisiones que tome el técnico elegido para llevar la nave, será seguida por unos medios de comunicación que elevarán hasta el infinito las expectativas y el nivel de exigencia, y un equipo que protagonizará fiascos sonados. Tras lo cual, por aquí andaremos a toro pasado para pedir que rueden cabezas. Lo normal, vaya.

Por ello, sólo queda decirles a nuestros ilustres vecinos que, si se quieren reír de nosotros tanto como nosotros nos reímos de ellos, que se enrollen y no pongan tantas trabas. Porque todos tenemos derecho a hacer el ridículo.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo