Hamas recuerda al Gobierno israelí sus condiciones para liberar a Shalit
El movimiento islamista que gobierna en la Franja de Gaza se reafirmó ayer en sus demandas de cara a la liberación del soldado israelí Gilad Shalit, capturado en junio de 2006 por milicianos de Hamas. La liberación del militar Shalit, según aseguró el portavoz de Hamas Jalil al-Hayya, queda supeditada a la excarcelación de los prisioneros palestinos más antiguos, de cara a lo cual reiteraron su disposición a iniciar «negociaciones serias» con el Ejecutivo sionista.GARA |
Un dirigente de Hamas, Jalil al-Hayya, reiteró ayer que el soldado israelí Gilad Shalit, capturado en junio de 2006 por milicianos palestinos en la Franja de Gaza, no será puesto en libertad hasta que el Ejecutivo de Tel Aviv cumpla también con las demandas planteadas.
«Todos sus intentos seguirán fracasando hasta que sea liberado, cuando Israel excarcele a los presos palestinos más antiguos», aseguró Al-Hayya durante una ceremonia en la ciudad de Gaza en recuerdo del Miraj, el viaje del profeta Mahoma de La Meca a Jerusalén, según afirmó la agencia de noticias palestina Maan citada por Europa Press.
Al-Hayya apuntó además que las fuerzas de seguridad del movimiento que gobierna en la Franja de Gaza cuentas con fuentes de información que confirman que los servicios secretos sionistas continúan intentando obtener información sobre Shalit, cuyo caso ha abierto un gran debate en el seno de la sociedad israelí. Mientras los sectores que podrían denominarse de izquierda defienden la negociación para el canje de prisioneros, los conservadores lo rechazan contundentemente y consideran que una intervención militar es la única forma de liberar a Shalit.
El dirigente islamista aseguró que su formación está dispuesta a abrir «negociaciones serias» con el Estado sionista para concretar el citado acuerdo de intercambio de prisioneros.
Precisamente, el pasado lunes, unas 15.000 personas se dieron cita en Tel Aviv [con motivo de una marcha iniciada dos semanas atrás] para solicitar al Gobierno de Benjamin Netanyahu que dé un impulso a un diálogo que parece estancado.
Obama y Abbas
El presidente estadounidense, Barack Obama, mantuvo la tarde del viernes [madrugada de ayer en Euskal Herria] una conversación telefónica con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, en la que ambos dirigentes sopesaron las posibles vías para impulsar las negociaciones cara a cara entre la ANP e Israel «con el objetivo -según declaraciones de la Casa Blanca- de alcanzar un acuerdo que ponga fin al conflicto y que establezca la creación de un Estado independiente y viable para que los palestinos vivan junto a Israel en paz y seguridad».
«Obama prometió a Abbas que pondría todos sus esfuerzos para la instalación de un Estado palestino independiente que viva en la seguridad, la paz y la estabilidad al lado de Israel», apuntó el portavoz de Abbas, Nabil Abu Rudeina.
Añadió que durante la semana que viene, el mediador estadounidense George Mitchell regresará a la región. Mitchell lleva desde el 9 de mayo negociaciones indirectas entre ambas partes con el fin de reactivar el proceso de diálogo, bloqueado desde hace 18 meses.
Al concluir la marcha en favor de la liberación de Gilad Shalit, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, mantuvo un breve encuentro con los familiares de este soldado, según la Radio del Ejército.
Israel anunció ayer haber alcanzado un acuerdo con Grecia y Moldavia para impedir que llegara a Gaza un barco con ayuda humanitaria fletado por Libia, informó Efe. El Gobierno sionista afirmó que su objetivo era vitar sucesos similares a los ocurridos el pasado 31 de mayo con la Flotilla de la Libertad, cuando 9 ciudadanos turcos murieron tras el asalto israelí al convoy humanitario.
El pacto fue revelado por el Ministerio de Exteriores de Israel, que dijo a medios locales que ambos países se habían comprometido con el jefe de la diplomacia sionista, Avigdor Lieberman, a realizar esfuerzos para impedir que el barco, de bandera moldava, abandonara el puerto griego donde estaba atracado.
Según las fuentes, el acuerdo contemplaba que, en caso de zarpar, el barco debía comprometerse a poner rumbo al puerto egipcio de Al-Arish, cercano a Gaza.
Durante la tarde de ayer, el Ministerio de Asuntos Exteriores heleno confirmó que todos los papeles del navío estaban en regla y que sus tripulantes habían confirmado que se dirigirían a Al-Arish.
Previamente, los sionistas habían solicitado a la Organización de Naciones Unidas que impidiera zarpar a la embarcación, argumentando haber satisfecho las demandas internacionales de abrir el enclave palestino al ingreso de productos de consumo. GARA