Tour 2010 Los dos corredores del Quick Step han salvado el Tour de su equipo y del ciclismo francés con dos etapas y presencia en el podio
La combatividad de Chavanel y Pineau agrada a Jalabert
El líder es el primer francés en ganar dos etapas en un mismo Tour desde que en 2001 lo hiciera el ex ciclista de Once y CSC, y lo ha logrado de forma similar.
Joseba ITURRIA | LES ROUSSES
La estación de esquí de Les Rousses vivió ayer una jornada de un calor insoportable, que dejó paso a una fuerte tormenta que provocó el caso en la zona de meta. Sobre la carretera la tormenta llegó con la exhibición de Sylvain Chavanel, primer francés en ganar dos etapas en un mismo Tour desde que lo hiciera Jalabert en el 2001.
El ex ciclista de la Once y del CSC comenta el Tour para la televisión francesa, entre otros medios. En las etapas más importantes se tiene que subir a la moto porque junto al comentarista de la televisión se sienta Laurent Fignon, que lucha contra un cáncer que le ha dejado muy mermado físicamente y que ha afectado también a sus cuerdas vocales. Por ello tiene que comentar la carrera con una voz ronca y sólo en las etapas más importantes por prescripción médica. En las demás tiene que descansar. Entonces Jalabert deja la moto y se pasa al puesto de comentarista. Ayer iba en la moto y se quedó encantado porque se vio reflejado en Chavanel, que se ha convertido en el corredor que él y Hinault siempre reclaman en el ciclismo francés. Corredores combativos que ataquen. Así ganó Jalabert sus dos etapas en el 2001 y así las ha logrado Chavanel ahora.
Por eso cuando el ciclista del Quick Step dejó de hacer declaraciones para los medios que le esperaron en la meta y cumplió con el trámite de su rueda de prensa acudió al puesto de la televisión francesa y allí tanto él como Pineau recibieron la felicitación de Jalabert: «Esto es bueno para el ciclismo. No en todas las épocas podemos tener corredores como Hinault y Fignon y es importante lo que están haciendo en este Tour Jerome y Sylvain. Han atacado desde lejos para estar adelante y esa es la mejor forma de correr».
Amigos y compañeros de equipo
Fue emocionante el encuentro de los dos protagonistas de la jornada con Jalabert, pero sobre todo el abrazo en el que se fundieron al término de la etapa Chavanel y Pineau ante las cámaras de televisión. Son compañeros de equipo, pero ante todo son amigos y esa amistad ha sido clave en las dos etapas ganadas por Chavanel tras aprovechar el trabajo de Pineau.
El líder del Tour ha encontrado su sitio en el pelotón dos meses y medio después de que su terrible caída en la Lieja amenazó con poner fin a su carrera deportiva. Siempre se dice que los grandes campeones lo demuestras en los momentos más difíciles y la forma en la que Chavanel ha superado sus graves lesiones dice mucho a su favor.
Ha necesitado correr en Quick Step y salir de su ciclismo -estuvo en la estructura del actual Bouygues (2000-04) y en el Cofidis (2005-08) para dar su mejor nivel. Se buscan siempre nuevas estrellas francesas para luchar por los puestos de honor del Tour y se ha depositado mucha presión sobre él desde que era muy joven. Ayer le volvían a preguntar sobre esto y respondía que «en Quick Step me he encontrado muy bien, rodeado de Jerome y estamos muy bien integrados en el grupo. El comportamiento del equipo es perfecto y es un placer correr aquí».
Su mejor nivel lo ha encontrado con su amigo Jerome Pineau -con el que fue compañero en el equipo de Bernaudeau (2002-04) y que siguió sus pasos para pasar al Quick el año pasado-,. Ayer destacaba que «hay cosas que pasan en la vida privada que se notan en la carretera, nos llevamos bien entre nosotros, pasamos mucho tiempo juntos y es bonito ver ganar a amigos. Lo he dado todo en la última subida. Yo luchaba por el maillot de la montaña, pero cuando me han dicho que venía por detrás he querido esperar y ayudarle porque está muy fuerte y es magnífico lo que ha logrado».
En la misma línea, Chavanel apuntaba que «tengo un equipo alrededor de mí que me ayuda mucho, con un Jerome Pineau muy fuerte. Además las subidas que había en la etapa con porcentajes del 3-4% me convienen. Lo de mañana -por hoy- y otros días es más difícil». Pero pese a eso por vez primera Chavanel no descarta disputar una buena plaza en la general del Tour y quiere defender su maillot.
«Voy a intentar guardarlo el máximo tiempo posible. Cadel Evans y Andy Schleck son las mayores amenazas ahora. De momento, no quiero hablar de acabar entre los diez, cinco o tres primeros. Iré día a día, mi frescura es importante. Desde antes de la salida del Tour, estoy muy fuerte y veré cada día si puedo defender una plaza en la general, si puedo lograr puntos para la montaña o si gano una tercera etapa. No tengo estrés. Mi Tour ya está salvado y sería increíble acabar entre los diez primeros, es el primer año en el que pensaría en eso».
Para ello intentará aguantar en el final de Morzine: «Pienso que los equipos de los grandes líderes querrán controlar la carrera, aunque todo el mundo espera a los Pirineos porque la carrera se decidirá en la tercera semana. La etapa de Morzine es diferente, de alta montaña, pero cuando estoy en buena forma puedo pasar bien la montaña. He sido quinto en el Ventoux en la Dauphiné del 2005, he logrado buenos resultados en la alta montaña. Voy a darlo todo y veremos qué pasa. Luego tengo la jornada de descanso para poder recuperar todos las fuerzas, pero si lo pierdo no es grave. He tenido grandes jornadas en este Tour y estoy muy contento».
Se tomaba la victoria «como una revancha. La primera vez que gané se dijo que fue porque el pelotón se paró. He salido para coger la escapada y cuando estás en una espiral positiva todo funciona y debemos aprovecharlo. Por eso intentaré ganar una tercera etapa».
Y de cara al futuro se plantea disputar las clásicas en la primera parte de la temporada y después el Tour. Es lo que hizo este año y recordaba que su actuación en la Lieja cuando se cayó demostraba que puede rendir en estas grandes pruebas.
Pineau, con el otro maillot
Tan feliz como Chavanel estaba Pineau con el segundo maillot más apreciado de la carrera. Había anunciado la víspera que iba a atacar para meterse en la escapada del día para defender la montaña y cumplió con su palabra: «Ha sido una etapa de muchas emociones. Antes de la salida le he dicho a Sylvain que tenía la presión por tener este maillot que tanto me gusta sobre mis espaldas. Había que trabajar por él, tengo buenas piernas y cada vez que hago un número por delante viene luego Sylvain para culminarlo».
Añadía que «no estoy obligado a defender este maillot hasta el final. No hay que ir al límite. Iremos día a día y se verá hasta donde lo aguantamos. Estos días me hacen olvidar lo que pasó el año pasado camino de Andorra, cuando me quedé sin poder coger el maillot amarillo».
«Intentaré guardar el máximo tiempo posible el liderato. Ahora no quiero hablar de acabar entre los primeros. Iré día a día y veré si puedo defender una plaza en la general, si puedo lograr puntos para la montaña o una tercera etapa».
«Antes de la salida le he dicho a Sylvain que tenía la presión por mantener este maillot que tanto me gusta sobre mis espaldas. Había que trabajar por él, tengo buenas piernas y cada vez que lo intento viene Sylvain para culminarlo».
Lugar y fecha de nacimiento: Izegem (Flandes), 23-8-1964.
Equipos co5redor: SEFB (1989), Lotto (1990-91), Once (1992-96 y 98), Rabobank (1997).
Trayectoria como director: US Postal-Discovery (1999-2006), Astana (07-09), Radio Shack (10)
PALMARÉS:
Como corredor ganó dos etapas en el Tour (1993-95), una de ellas tras el inolvidable ataque de Indurain camino de Lieja, una en la Vuelta (1992), dos en Suiza (89), dos y una general en el Tour de la CEE y en Frankfurt (1991).
TRAYECTORIA DE DIRECTOR:
Ha ganado nueve de los once Tours en los que ha participado con Armstrong y Contador, dos Vueltas (Heras y Contador) y dos Giros (Contador y Savoldelli).