Los iraníes siguen en paradero desconocido
N.M. | IRUÑEA
Segunda jornada de pretemporada y los jugadores iraníes Javad Nekounam y Masoud Shojaei siguen sin comparecer y, lo más grave, sin dar señales de vida. Desde el club rojillo se sigue llamando a ambos futbolistas y a su entorno más cercano, pero nadie responde a los requerimientos de Osasuna.
No es la primera vez que sucede una situación similar, especialmente cuando ambos han tenido que disputar partidos internacionales, pero en dichos casos la argumentación o excusa -cada uno valorará lo que proceda- siempre ha sido la dificultad para enlazar vuelos.
En este caso, la única explicación a la desidia y falta de profesionalidad de Nekounam y Masoud puede estar en sus diferentes coyunturas deportivas. En el caso del primero, se ha hablado del interés del Olympiakos griego, que podría estar negociando directamente con el centrocampista, pero que no ha realizado oferta alguna hasta el momento para comprar su libertad, dado que al pivote le resta un año más de contrato con la entidad navarra.
En cuanto al delantero, su situación es diametralmente opuesta. Acuciado por su condición de cuarto extracomunitario, Masoud puede quedarse sin ficha para la campaña entrante, a no ser que él o su compatriota se busquen acomodo en otro destino. Por tanto, es muy probable que esté centrado en buscarse una salida.
Además, el habilidoso pero apático e individualista jugador rojillo querrá mantener su condición de internacional para la Copa Asiática -se jugará el próximo enero- y ello es complicado sin disponer de minutos.