Reformas en Cuba
Fidel pide a Obama que no inicie una guerra contra Irán
GARA |
El líder cubano Fidel Castro reapareció ayer en la Asamblea Nacional del Poder Popular [Parlamento] después de cuatro años, con un mensaje que advierte de que se están dando las condiciones para «una guerra de dimensiones desproporcionadas contra Irán», destacando que sólo el presidente de EEUU, Barack Obama, puede evitarla, según informó Telesur.
Durante su discurso, que fue presenciado por el presidente cubano, su hermano Raúl Castro; el titular de la Asamblea Nacional, Ricardo Alarcón; y altos dirigentes del Estado y el Gobierno, el líder de la Revolución indicó que «sólo un hombre tendrá que tomar la decisión en solitario, el presidente de Estados Unidos, con seguridad, por sus múltiples ocupaciones no se ha dado cuenta todavía, pero sus asesores sí empiezan a comprenderlo».
«Todo cuanto el hombre pretende tiene un límite que no puede sobrepasar, en este caso crítico el presidente Barack Obama es el que tendría que dar la orden del tan anunciado y pregonado ataque, siguiendo las normas del gigantesco imperio», añadió.
EEUU lidera una campaña de varias potencias occidentales para sancionar, a través de organismos internacionales, a Irán, a quien acusan de disponer de un arsenal nuclear, a pesar de que Teherán ha negado en repetidas ocasiones estas imputaciones, destacando que el uso de la energía atómica responde únicamente a necesidades de carácter civil, como la generación de electricidad.
Fidel Castro consideró que en el mismo instante que Obama dé la orden de atacar a Irán, mediante «un incontable número de proyectiles nucleares acumulados en una absurda competencia entre las potencias, estaría ordenando la muerte instantánea no sólo de cientos de millones de personas, sino también de un número incalculable de habitantes de su propia patria y los tripulantes de todos los navíos de las flotas de EEUU».
El líder de la Revolución cubana recordó que el poder del arsenal nuclear acumulado actualmente por las potencias es 450.000 veces superior al de las bombas que destruyeron las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki en los estertores de la Segunda Guerra Mundial.
A raíz de ello, indicó que si se toma conciencia sobre las consecuencias de una posible guerra contra Irán, «los países más poderosos del mundo, aliados o adversarios, con la excepción de Israel, exhortarían a Obama a que no lo haga. El mundo le rendiría después los honores correspondientes».
Añadió que si la guerra estallase, «el orden social vigente desaparecería abruptamente y el precio sería infinitamente mayor».
Fidel Castro considera que si se evita la guerra, «la población puede ser regulada, los recursos no renovables preservados, el cambio climático evitado, el trabajo útil de todos los seres humanos garantizado, los enfermos asistidos y los conocimientos asegurados».