El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada (DOC) Rioja comienza hoy el seguimiento de maduración de la uva de la cosecha de 2010, una semana después respecto a 2009, conforme al retraso en la maduración de la uva. Según datos facilitados por el Consejo a la agencia Efe, las previsiones son de que el próximo miércoles se publique el primer boletín del control de maduración.

A partir de esa fecha, los controles serán semanales hasta el comienzo de la vendimia en cada zona. Como cada año, el Consejo presta este servicio con el objetivo de favorecer la obtención de la máxima calidad en los vinos elaborados.

De esta forma, los resultados de los análisis de las muestras recogidas permitirán ofrecer un primer balance cualitativo de la situación actual y perspectivas de la cosecha. Las muestras recogidas son analizadas en los tres laboratorios oficiales de la Denominación: Estación Enológica de Haro, en La Rioja; Estación Enológica de Olite, en Nafarroa; y Casa del Vino de Laguardia, en Araba.

Veinte zonas

Para la recogida de muestras, el territorio de la DOC Rioja se subdivide 20 zonas vitícolas, dada la diversidad climática que presenta, coincidiendo la variación con su orografía y con la gradación progresiva de la altura del valle del Ebro, cuyas cotas van de 300 a 700 metros. Los viñedos «testigo» -55 en total- se han elegido teniendo en cuenta su grado de representatividad de la zona en que se ubican, tomándose en cada uno de ellos 100 bayas de 33 cepas diferentes -dos bayas son del hombro y una del ápice de cada racimo-.

Este año, las altas temperaturas de los últimos días de agosto han adelantado la maduración en la Denominación, cuya vendimia se prevé para los primeros días de setiembre en las zonas más tempranas -Rioja Baja-, con un previsión de cosecha en unos 400 millones de kilos de uva de calidad.

Un 10% menos de rendimiento

El presidente de la Asociación de Enólogos de Rioja, Antonio Palacios, confirmó a Efe «el buen estado sanitario» que presenta la uva en toda la Denominación y precisó que el viñedo no apreciará la escasez de lluvias de agosto, debido a que el Consejo Regulador autorizó el riego hasta el pasado día 15.

El rendimiento máximo autorizado para esta próxima vendimia ha quedado en 5.850 kilos por hectárea en uva tinta (un 10% menos que en la pasada campaña, lo que ha originado las protestas de los pequeños productores), mientras que para uva blanca el rendimiento se mantiene en 9.000 kilos por hectárea.