VUELTA Segunda etapa
Hutarovich se salta el guión
La jornada transcurrió según lo previsto, con fuga y sprint, hasta que el bielorruso superó a Cavendish.
Amaia U. LASAGABASTER
Columbia controló, Liguigas enfiló y La Française se lo comió. Yauheni Hutarovich se convirtió en el inesperado ganador de la segunda etapa de la Vuelta (173 kilómetros entre Alcalá de Guadaira y Marbella).
Todo apuntaba a que el maillot rojo se iba a encontrar una alfombra de idéntico color para sumar su primera victoria en la Vuelta, una de las pocas carreras en la que todavía no ha levantado los brazos. Y, probablemente, el británico era el primero en pensarlo, de ahí su cara de sorpresa cuando vio aparecer a una bala aún más veloz adelantándole por la izquierda en los últimos metros. Y ni siquiera era Benatti, Farrar, Petacchi o cualquiera de los sprinters que, en teoría, pueden al menos soñar con superar al Expreso de Man. Era un bielorruso de 27 años. Rápido, sí, pero con un par de etapas en Polonia, Lorena o el Tour del Mediterráneo como puntos culminantes de su curriculum. Un corredor por el que pocos, en definitiva, habrían apostado cuando arrancó la etapa.
La campanada de Hutarovich fue prácticamente el único sobresalto que salvó al espectador de la siesta. A la que, probablemente, también se habría sumado el pelotón. Las temperaturas han bajado, pero en tierras andaluzas el mercurio sigue más cerca de los cuarenta que de los treinta. Con el paseo nocturno de la víspera y casi 200 kilómetros sin dificultades, el guión era más que evidente: escapada, recorte paulatino y sprint.
La primera parte le correspondió a un cuarteto de aventureros, que pronto se redujo a trío por la caída de Mickael Buffaz -ya de vuelta en casa con una fractura de clavícula-. Johnnie Walker, Javier Ramírez y Mickael Delage siguieron adelante con la certeza de que su fuga, con Columbia controlando por detrás, tenía poco que hacer. Delage -que también se fue al suelo, aunque con menos consecuencias que las de su compatriota- fue el último en arrojar la toalla.
Culminada la caza y con una quincena de kilómetros de descenso hasta la recta de meta, el resto de expresos tomó el relevo de Columbia. Al que el trabajo de la jornada, la exhibición de la víspera y el calor pareció pasarle factura. Liquigas, Lampre y Garmin coparon las primeras posiciones, con Mark Cavendish intentando hacerse hueco junto a un solo compañero. Pareció que le bastaba. Hasta que Hutarovich metió el turbo.
Los pronósticos apuntan hoy en otra dirección. Los 157,3 kilómetros de la tercera etapa entre Marbella y Málaga incluyen el ascenso al Puerto del León (1ª) a treinta kilómetros de meta y una última rampa de dos kilómetros que complicará el trabajo de los galgos.