El primer ministro irlandés, Brian Cowen, calificó ayer de «imperativo» el recorte presupuestario que prevé aprobar el próximo diciembre dado que el rescate del Anglo Irish Bank (AIB) ha supuesto para las arcas del estado un «terrible peso».

En su intervención durante una reunión de su partido, el Fianna Fail, en Galway, Cowen reconoció que los 22.900 millones de euros del rescate del Anglo Irish Bank han afectado seriamente al país. Por ello, consideró necesario que el Gobierno lleve a cabo un recorte de 3.000 millones de euros en el presupuesto que presentará el 7 de diciembre si se quiere que Irlanda reduzca su déficit fiscal hasta el 3% del PIB.

También anunció que dará a conocer antes de finales de mes una nueva estrategia sobre comercio, turismo e inversión.