«No hay más truco que fijarse en lo que nos hace vibrar en los ensayos»
Iñaki Imaz
Guitarra de Zea Mays
Todos aprenden de todos en esta escena dinámica y cada vez más variada. Iñaki y Aiora son habituales de las salas de conciertos, así que entre mimetismo, evolución propia y talento natural, Zea Mays completa una historia sólida y fértil, como muestra en «Era», su nuevo y flexible disco.
No es sencillo, pero los bilbainos Zea Mays llevan ya trece años sin cambios de formación y con una carrera en continuo progreso. Esfuerzo que les ha llevado a ser una de las bandas vascas más populares y sólidas. La edición de «Era» confirma todos los extremos, ya que el grupo mueve los controles de amplis, pastillas, cuerdas y actitud, para ofrecer, tres años después de la salida de «Morphina», un disco repleto de sorpresas, pero impregnado del sonido Zea Mays, el que con tanto tesón y voluntad han creado Iñaki Imaz (encargado en una empresa de servicios integrados), Aiora Renteria (profesora de música en infantil y primaria), Asier Basabe (profesor de soldadura) y Rubén González (técnico de sonido).
Por circunstancias musicales, relacionadas con la persona y la evolución, y que explican en la entrevista, Zea Mays ha optado por un disco que continúa el aliento de «Morphina» y obras anteriores, pero con la extensión de teclados y programaciones. El resultado es un disco más variado de lo previsible y más fresco en su globalidad. Un duro trabajo que nace en el laboratorio del barrio de Irala, local de ensayo, donde, con la ayuda de Split77, expertos en programaciones, y la de José Lastra, posteriormente, técnico de sonido en los estudios Lamina de Mungia, se ha conseguido un excitante disco final.
El sonido más clásico de Zea Mays se encuentra destapando «Nire huts gorena»; «Ihes» despierta la curiosidad y alerta del cambio; «Negua joan da ta» es una singular y hermosa balada que la cantarían también Ken Zazpi o Kerobia; «Insolatutako uhartean» recobra el pasado y la guitarra de Iñaki; «Hondopatzean» es un sugerente cruce de guitarras con «reverb», surfera, hasta la llegada de un brioso giro que la transforma en rock de media noche en el medio de la pista de baile. «Era» se inicia stoner, gira rockera, pilla atmósfera, se envenena bajo la guitarra y se convierte en un clásico del disco. «Gorputz pentsamendu huts» balancea la imaginación y fluye en espiral. Se recupera y regraba «Kukutxa III», himno para el gaztexe de Errekalde, y pieza fundamental en la historia de Zea Mays.
El disco se masteriza en Londres con Tony Cousins, ganador este año del premio al mejor masterizador de Gran Bretaña.
Han pasado por una primera etapa heavy, después llegó el rock alternativo con buenas andanadas de guitarra y ahora añaden a su historia electro-rock.
Aquí no hay más truco que fijarse en lo que nos hace vibrar en los ensayos. El método de composición ha sido reunir un montón de estrofas con su estribillo y estructura e ir guardándolo sin finiquitarlas. De esta manera, hemos trabajado con mucha libertad para extendernos dentro de diferentes parámetros musicales sin ningún prejuicio. Este sistema nos ha ayudado a apuntarnos a un bombardeo ya que de primeras no teníamos la responsabilidad de acabar el tema. Posteriormente, hemos hecho la recolecta de lo sembrado y nos hemos quedado con lo mejor, sean manzanas o lechugas.
¿Desde cuándo se contempla la idea de ampliar el concepto musical?
Desde la primera maqueta llevamos la misma manera de concebir la música. La vida pasa, crecemos, y muchas de nuestras necesidades van variando con el tiempo en un proceso de adaptación constante. En una época escuchamos unos discos con locura y los conseguimos absorber como vampiros y, una vez que te ha llenado entero, pasa a la estantería a formar parte del recuerdo. Así ha sido la evolución de nuestros discos y la adaptación de nuestras necesidades.
Los músicos del ámbito rockero tienden a infravalorar el rock bailable (ritmo, programaciones...) ¿Qué opinión tienen al respecto?
Este tipo de valoraciones poco a poco van formando parte del pasado. Hoy en día, gracias a no sé quién o porque las comunicaciones se van desarrollando o la tecnología evoluciona, se quiera o no, ya no hay tanto prejuicio hacia los diferentes estilos si haces buenas canciones, con mucha energía y siendo sincero con lo que transmites. La gran novedad de este siglo ha sido el éxito de los macrofestivales donde te puedes encontrar de todo.
¿Se podría hablar de álbum de tránsito hacia otra sonoridad o el destino es una incógnita?
No tenemos ni idea de por dónde nos puede dar el aire de aquí en adelante. De todas formas, nuestra evolución la vemos bastante equilibrada y no pasamos nunca al otro lado cerrando la puerta. Caminamos dejando todo abierto.
Han decidido que el disco se venda, fundamentalmente, en los conciertos. ¿Cómo ven esta ruptura de esquemas: discográfica, distribución, royalties...?
A día de hoy, hemos pasado ya por todo. Hemos trabajado siempre con las estrategias de los demás, sin ser tú el más beneficiado, a pesar de poner la materia prima, ya que las normas las ponen otros por ti. Nos autogestionamos y esta vez hemos pensado en hacer algo sencillo: tocar siete conciertos de presentación distribuidos por diferentes herrialdes donde la entrada con el disco valdrá 10 euros. Es otra forma de distribuir el disco y no tienes la necesidad de depender de un sector que sólo valora tu trabajo por su repercusión económica.
¿Cómo se ve el trabajo atrapado en las cajas de cartón cuando llegan los discos?
Pues nada, el local de ensayo va ampliando su función y ya tiene su parte de almacén. A la vez nos decora el local ya que este disco va a salir con cuatro portadas diferentes, así que, junto con las reservas de los cinco discos anteriores, tenemos el local precioso.
Mezclar este disco no habrá sido una tarea sencilla con tantas sonoridades que atender.
¡Ha sido terrible! Pero al final el resultado ha sido muy satisfactorio. Cuantos más arreglos metes, las variables se multiplican, más los diferentes puntos de vista de los implicados puede ser una bomba de relojería. Pero el disco ha pasado nuestro control de calidad.
Grupo: Zea Mays.
Título: «Era».
Venta: En las primeras siete presentaciones del disco, el precio de la entrada incluirá el disco, 10 euros. Posteriormente continuarán los conciertos bajo otras condiciones.
Siete fechas: 16 de octubre: Kafe Antzokia de Ondarroa. 22 de octubre: Gaztetxe de Gasteiz. 5 de noviembre: Gaztetxe de Ziburu.
6 de noviembre: Kukutza de Bilbo. 13 de noviembre: Bonberenea de Tolosa. 26 de noviembre: Doka de Donostia. 27 de noviembre: Plateruena de Durango.
Curiosidad: El disco se publica con cuatro portadas distintas. Diseño de David González, bajo de Berri Txarrak y Cobra.
«Hemos trabajado siempre con las estrategias de los demás, sin ser tú el más beneficiado, a pesar de poner la materia prima, ya que las normas las ponen otros por ti»
«Nuestra evolución la vemos bastante equilibrada y no pasamos nunca al otro lado cerrando la puerta. Siempre caminamos dejando todo abierto»
¿Se han quedado con ganas de que las canciones más electro-rock aún lo fuesen más?
Nosotros por lo general no somos muy aficionados a la música electrónica, nos cansamos enseguida. Sí que nos gustan varias características, como aguantar el pulso de la canción sin parar o las atmósferas que te permiten crear. Tenemos el local ahora mismo lleno de pedales, sintetizadores, disparadores... pero para hacer rock potente, al menos de momento. No es el qué, sino el cómo, de ahí viene el titulo del disco «Era» (Modo), por la libertad que te da el poder contar con todas las posibilidades sabiendo que su valor está en función del tratamiento personal que le dé cada uno. Tampoco podemos olvidar que quienes nos han hecho y ayudado en todo esto de las programaciones han sido Split77, que en breve sacarán nuevo disco; sin ellos hubiese sido imposible. Esperamos que nos sigan ayudando para poder aprender a utilizar toda la cacharrería.
Y curiosa también la portada y el diseño.
Confiábamos plenamente en David para el diseño. Le contamos un poco la película sobre el disco, su título, la frescura de las canciones... y acertó de pleno. Además, habrá cuatro portadas diferentes. Estamos encantados con el diseño y le damos las gracias al doscientos por cien. P. C.