Bigas Luna fue el descubridor de Penélope Cruz y Javier Bardem en «Jamón, jamón», así que el cineasta catalán ha debido de pensar que tiene derecho a contar la historia de las actrices latinas que acaban convirtiéndose en estrellas de Hollywood, que es lo que le ha ocurrido a la de Alcobendas. Lo malo es que para representar dicha ascensión ha escogido a Elsa Pataky, que ni es actriz ni es estrella.

Otro problema es el estilo, dado que las maneras mediterráneas del cineasta catalán no encajan en Hollywood, por mucho que la fábrica de sueños ya no posea el glamour y la sofisticación de antaño. Bigas Luna ha querido reflejar el lado más vulgar y escabroso de ese mundo decadente, pero a fuerza de tirar de los tópico salidos de la prensa sensacionalista.

De todas formas, «Didi Hollywood» era un paso lógico y obligado dentro del proyecto de trilogía sobre las chicas y el éxito, que inició con la anterior «Yo soy la Juani». Entonces describía la lucha de una chica de barrio por llegar a ser actriz, con lo que ahora toca contar lo que les pasa a las actrices que sueñan con ser estrellas. Una vez más, ha quedado demostrado que una cosa es la ficción y otra la realidad, en vista de que el ruidoso lanzamiento de Verónica Echegui se ha quedado en nada.