ACONTECIMIENTO EN EL PALACIO EUSKALDUNA
«Seguimos teniendo el firme apoyo de nuestros socios»
Director artístico de ABAO
La 59 temporada de la ABAO ha capeado la crisis y, a pesar de los recortes presupuestarios, su programación no se ha visto demasiado afectada en cuanto a número de representaciones para adultos y niños ni en actividades paralelas como conferencias.
En su conversación con GARA Jon Paul Laka, director artístico de la Asociación Bilbaína de Amigos de la Ópera, se muestra confiado sobre los proyectos emprendidos por la ABAO y la calidad de la programación de este año, pero deja entrever su preocupación sobre el futuro a medio y largo plazo si las ayudas de las instituciones siguen bajando.
El estreno de “Susannah” va a ser algo histórico, pues, a pesar de ser una obra bastante popular en Estados Unidos, es la primera vez que se representa en el Estado español y de las poquísimas veces que se ha podido ver en Europa. ¿Cómo se decidieron a traerla a la ABAO?
Nosotros tenemos un compromiso de programación por el que cada temporada intentamos incluir una obra del siglo XX o un estreno. Es gracias a este compromiso que hemos podido subir a escena obras de los últimos años como “Diálogos de carmelitas”, de Poulenc, o “Billy Budd” de Britten. El año pasado nos encontramos con “Susannah” en la lista de óperas contemporáneas de entre las que podíamos elegir y nos pareció doblemente interesante, pues se trata de una ópera inédita en el Estado pero también musicalmente valiosa y con un lenguaje accesible para el público. Es una de esas óperas que requiere de una gran cantante que justifique el personaje principal, se lo propusimos a Latonia Moore y ésta se mostró entusiasmada con la oferta. Teníamos algunas dudas con la producción, procedente de Chicago y Huston y que había pasado también por el Metropolitan de Nueva York. Cuando vimos que era factible hacerla en el Euskalduna terminamos por decidirnos.
Al margen de “Susannah”, ¿cuáles son las líneas generales de la programación de la ABAO esta temporada?
El criterio sigue en la línea del que hemos aplicado otros años: alternar óperas del gran repertorio de cara al público con otras no tan representadas. Y también un estreno, aunque este año vayan a ser dos, pues, además de “Susannah”, también “Il Corsaro” de Verdi es estreno absoluto en Bilbao. Se integra dentro del proyecto Tutto Verdi, que este año va a traernos otros dos títulos verdianos además de “Il Corsaro”, ambos de repertorio, como son “Don Carlo” y “Macbeth”. Este último título tiene además una historia de representaciones en Bilbo bastante sorprendente, pues aquí se pudo ver “Macbeth” varias veces cuando aun era una ópera prácticamente desconocida y rara en otros teatros de Europa. Llegará también “Eugenio Oneguin”, que sólo se había visto aquí por una compañía de ópera itinerante, y que será la primera ocasión en que nuestro coro tendrá que cantar en ruso. Por último, tenemos “La Italiana en Argel”, que hace mucho que no habíamos programado nada de Rossini, y un título super popular para cerrar la temporada, “Lucia di Lammermoor”.
De un total de siete títulos, tres son óperas de Verdi. El Tutto Verdi es un proyecto muy ambicioso, pero, ¿no les está hipotecando un poco en su capacidad de diversificar la programación?
El verbo hipotecar suena como si se tratara de una carga pesada. La realidad es que en años anteriores ya se venían haciendo tres y hasta cuatro óperas de Verdi por temporada. Esto sigue pasando en la actualidad, con la diferencia de que el Tutto Verdi le da una cierta continuidad y coherencia a la programación de títulos de Verdi. Es cierto lo que el otro día me decía un aficionado: no todo el mundo es forofo de Verdi. Pero claro, entre los aficionados hay muchos gustos divergentes y no se puede acertar con todos. Lo que es indudable es que Verdi es una piedra angular en la programación de cualquier temporada de ópera, y el Tutto Verdi nos permite disfrutar de los grandes clásicos del repertorio mientras vamos descubriendo otras obras, igualmente buenas pero menos conocidas, que nos revelan cómo fue la evolución de su lenguaje. “La battaglia di Legnano”, por ejemplo, fue una grata sorpresa para mucha gente cuando la hicimos recientemente. Por eso no considero que sea un proyecto que nos esté hipotecando, aunque sí es cierto que, teniendo tanto Verdi, a lo mínimo que añadas otra ópera de Rossini o Donizetti, como este año, ya tienes una temporada de marcado acento italiano. Este año no hay ninguna ópera alemana o francesa, y eso es algo que tenemos que compensar en las próximas temporadas.
¿Hay algún títulos de este año que usted espere con especial ilusión?
Eso es como que te pregunten cuál de tus hijos es tu favorito. Pero pienso que tener a Diana Damrau cantando la Lucia y a Daniela Barcellona haciendo Rossini va a ser algo muy importante desde un punto de vista vocal. También “Eugene Oneguin”, que es una ópera que a mí me gusta muchísimo y que es la primera vez que se va a presentar en la ABAO.
¿En qué está afectando la crisis a la ABAO? ¿Se ha resentido este año el número de abonados?
Nos ha afectado como a todos los teatros. El presupuesto disponible es inferior y las ayudas de las instituciones han bajado, eso es algo público y notorio, pero intentaremos que no se traslade a lo que ve el público. Esto nos obliga a incidir más en co-producciones y colaboraciones con otros teatros. Nos hemos apretado el cinturón y esta temporada podemos salvar el número de actividades y su calidad, pero hay que plantearse cómo hacerlo sostenible a medio y largo plazo como las ayudas sigan bajando. Afortunadamente, seguimos teniendo el apoyo de nuestros socios y la bajada en el número de abonados no ha sido drástica. M.C.n