ELA exige controles de amianto en la red de hospitales de Osakidetza
Marisa Veci e Iñaki Arostegi, delegados de ELA en el Hospital de Cruces, señalaron a GARA que las obras en varias zonas del hospital se encuentran paralizadas por la aparición de amianto. Ambos señalan que estos controles se activaron por los dos trabajadores, uno de mantenimiento y otra empleada, que han fallecido este año por mesoteliomas pleurales. ELA aseguró que «los demás hospitales de la red de Osakidetza también tendrán amianto».
Juanjo BASTERRA |
ELA exige la necesidad de realizar exámenes exhaustivos de amianto en la red de hospitales de Osakidetza. Marisa Venci e Iñaki Arostegi, de la sección sindical de ELA del Hospital de Cruces-Gurutzetako Ospitalea, reconocieron a GARA que, tras las dos muertes por mesotelioma pleural del ex trabajador de mantenimiento Francisco Javier Rojo y de la empleada sanitaria Begoña García Eguiluz, que compartió trabajo en el hospital de Cruces y en San Eloy, es necesario una inspección de toda la red hospitalaria, porque los centros sanitarios más importantes se construyeron cuando todavía el amianto era un material muy utilizado.
En este momento, todas las obras del Hospital de Cruces se encuentran paralizadas hasta que el informe de control del amianto esté finalizado y se adopten las medidas para desamiantarlo o aislarlo de forma eficaz, aunque esta última posibilidad es muy difícil de garantizar. Marisa Venci e Iñaki Arostegi reconocieron que el estudio de la existencia del amianto sólo se está realizado en Cruces. «Este hospital es pionero en este estudio. Se deberían hacer en todos los hospitales, porque son de la misma época que éste y cuando el amianto se utilizaba sin ningún tipo de prevención ni seguridad», precisaron los delegados de ELA.
Todavía se espera a la conclusiones del estudio de la ubicación exacta de amianto dentro del hospital, pero se conoce que está extendido por las cubiertas, por los suelos del hospital, las bajantes, etc. «En agosto paramos una obra -señala Venci- aunque nos costó y en este momento las obras en la segunda planta de consultas externas está también paralizada, entre otras obras, porque el estudio ha desvelado que hay amianto». Todavía la dirección del Hospital de Cruces no ha transmitido los resultados detallados a los delegados de prevención del centro hospitalario, por lo que se está a la espera de obtenerlos para conocer las medidas que se deben adoptar». Lo cierto es que el Hospital de Cruces se ha sometido durante bastantes ocasiones a remodelaciones, ampliaciones y mejoras, pero nunca se han adoptado medidas para evitar que los trabajadores inhalen las fibras de amianto que pueden estar incubando desde diez a cuarenta años.
A comienzos de setiembre, el jefe de Neumología del Hospital de Cruces, Víctor Sobradillo, en declaraciones a este diario reconoció que en ese hospital saldrán más casos de mesoteliomas, un tipo de cáncer vinculado de forma directa a la inhalación del mineral de amianto.
En 2009, según los datos de la Asociación de Víctimas del Amianto de Euskadi, registraron, al menos, diecisiete muertes de trabajadores por culpa del amianto. Hasta este mes han fallecido otros 17 trabajadores por haber estado en contacto con el amianto durante su vida laboral. Estos son casos que se conocen, aunque desde esta asociación se reconoce que hay otros que se silencian por diferentes motivos y permanecen ocultos.
Aunque se conoce la peligrosidad del amianto, puesto que genera 100.000 muertes al año en todo el mundo, todavía su producción y consumo es muy alto a pesar de que en muchos países está prohibido. Europa consumió 621.000 toneladas de amianto en 2007 y algunos países importan este mineral cancerígeno para después reexportarlo.
Según los datos del Servicio Geológico de Estados Unidos, la producción de amianto ha disminuido a un ritmo bajo. En 2005 se produjeron en todo el mundo 2,2 millones de toneladas, casi la mitad en Rusia, pero en 2009 esa producción se encuentra en 2,07 millones de toneladas. Brasil produjo 288.000 toneladas, Canadá (150.000 toneladas), China, 380.000 toneladas; Kazakhstan, (230.000 toneladas), Rusia (1 millón), según los datos de Robert L. Virta y Lisa D. Miller.
En una comparativa entre 2003 a 2007, se demuestra que el consumo de amianto en África casi se ha triplicado, al pasar de 28.600 toneladas a 61.700 toneladas en ese período. En Asia ha aumentado de 1,07 millones de toneladas a 1,22 millones de toneladas. Entre América central y del Norte, se ha pasado de 58.200 toneladas a 67.700 toneladas. En Europa, se ha reducido de 857.000 toneladas a 621.000 toneladas. Rusia consume la mitad. En este caso, en el Estado español, prohibido desde junio de 2002 se consumieron en 2007 28 toneladas, aunque en 2004 llegaron a 192 toneladas. En el Estado francés, en 2007 se consumieron 169 toneladas según el Servicio Geológico de EE.UU, que reconoce que crece la producción de nanoasbestos. J. BASTERRA
