Cinco trabajadores de la empresa Dynamobel seguían ayer encerrados en la iglesia iruindarra de San Lorenzo en contra del expediente que ha presentado la dirección para despedir a 49 de los 116 trabajadores de la empresa. Los cinco iniciaron la protesta el pasado miércoles y afirman que no la dejarán hasta que se solucione el conflicto.

Ayer dos delegados del sindicato LAB se sumaron al encierro. Desde este sindicato denunciaron duramente que el expediente que ha presentado la dirección de la empresa es un expediente «sin razón», «lleno de mentiras» y «con falta de muchos datos». «Queremos decir claramente que esto es un fraude», afirmó LAB. Sostiene que la documentación e información que la empresa ha entregado al comité, y también al Gobierno de Nafarroa, está lleno de datos erróneos e interesados, mientras oculta otros muchos, «para justificar un expediente injustificable». Asimismo, el sindicato abertzale criticó la actitud del delegado de UGT en la empresa, así como la de los dos delegados independientes, «por haber forzado una votación ilegal».

No obstante, subrayó que la mayoría de la plantilla no respaldó dicha votación. Según los datos ofrecidos por el sindicato abertzale, de un censo de 116 trabajadores fueron 54 los que participaron en la votación para mostrar el apoyo o el rechazo a dicho expediente y 44 (el 38% de la plantilla) votó a favor. Por contra, a la asamblea de trabajadores acudieron 112 personas de las cuales la mayoría optaron por ir a apoyar a sus compañeros encerrados en la iglesia, según explicó LAB.

Esta central, al igual que hicieron los trabajadores encerrados, exigió al Gobierno de Nafarroa que no entre ni a valorar los despidos, «porque esto es un fraude».