Todo el mundo ha discutido alguna vez sobre cuándo se acabará el petróleo, si durará cua- renta, cincuenta años o a qué generación le tocará. Pero, ¿quién lo sabe? ¿Quién puede dar una respuesta seria? Más allá de las grandes petroleras o los ministerios de Defensa de Alemania, Gran Bretaña o la CIA, la organización que con mayor fiabilidad puede fechar el fin del combustible del que la humanidad sustrae el 40% de su energía y alimenta el 95% del transporte es la ASPO. Sin embargo, a esta entidad no le preocupa el fin de las existencias, sino la llegada del cénit, el pico a partir del cual la extracción de petróleo decae. Sus predicciones, por otra parte, coinciden con las de la CIA, Alemania y Gran Bretaña: estamos ya sobre el zénit del petróleo. Pedro Prieto lo explicó ayer en Zabaldi.

¿Por qué preocuparse por el cénit del petróleo y por cuándo se agotará el combustible?

La explotación de los pozos petroleros sigue una curva en forma de campana. Desde que se descubre el yacimiento, la producción comienza a incrementarse hasta que llega un punto en el que ya no puede más, el cénit, cuando comienza a caer, hasta que llega un momento en el que se agota o es demasiado costoso extraer. En EEUU, donde primero se comenzó a bombear petróleo, la producción hoy día es un tercio de lo que fue. La conclusión a la que llegaron Campbell y Laherrère en 1998, con toda la documentación, es que el zénit del petróleo llegaría entre 2008 y 2010. Las consecuencias son brutales. Si cada año contamos con menos petróleo que el año anterior, el modelo económico sobre el que estamos funcionando tiene grandes problemas.

Explíquese.

El crecimiento económico sólo se puede dar si hay un sustrato energético que alimenta la trasformación de la naturaleza para la creación de bienes y servicios. Si hay menos energía que el año anterior, el sistema económico no puede crecer.

¿A qué se dedica el grupo ASPO? ¿Qué datos maneja?

Esta asociación científica sin ánimo de lucro se crea con las valiosas bases de datos de Petroconsultants y Total. Esto se va a actualizando con nuevos datos, creando un sumatorio global para tratar de predecir qué ocurrirá. Reconocemos que hay imprecisiones: multinacionales que mienten por intereses geopolíticos, estados con empresas nacionalizadas que incrementan o reducen reservas por diferentes motivos... pero tratamos de ajustarnos al máximo.

Perdone, pero no me resisto. Entonces, ¿cuándo se acaba el petróleo?

Ya en los 90, British Petroleum y la Enciclopedia Británica auguraban que al ritmo actual el petróleo se acabaría en 45 años. Esta cifra viene de la división entre las reservas y el nivel de consumo. Hoy consumimos 32.000 millones de barriles al año y hay reservas de algo más de un billón de barriles. Si hacemos la cuenta, nos quedan unos 40 años. Nosotros consideramos que más importante que conocer cuál será el día en que se agote la última gota de petróleo, es saber la fecha del cénit, porque a partir de ese momento desde un punto de vista físico y geológico habrá un declive de la producción. Mientras eso ocurre, hay cada vez más gente que demanda petróleo y no podrá ser abastecida.

Vayamos al plano económico.

Los que analizamos el petróleo creemos que la crisis financiera mundial no es otra cosa que una respuesta de los grandes bloques financieros a la constatación física de que va a haber cada vez menos energía. Cualquier actividad económica se basa en la energía. Hay aviones porque hay queroseno, hay transporte de mercancías porque existe gasoil, etc. Si decrece la energía, decrece la actividad económica. Un banco presta un capital con intereses, porque supone que el beneficiario es capaz de transformar la naturaleza de tal forma que será capaz de devolver lo prestado más los intereses. Pero si no puedes generar esa transformación porque la energía se encarece, el banco quiebra. Ésta es la clave de la crisis. Sin embargo, toda la prensa sostiene que la crisis económica se debe a la crisis financiera y que la crisis financiera se debe a la crisis economía. Eso es un oxímoron, una referencia circular. Sin embargo, la crisis financiera debe basarse en algo físico. Por ello, lo único que se nos ocurre es que desde 2008 hay menos combustible líquido que en años anteriores.

¿Cada año se extrae menos petróleo?

Ha disminuido la producción de petróleo convencional, el fácil de extraer y que necesita poco refino. Actualmente, un 15 o un 20% del crudo proviene ya de lugares que antes no se explotaban, como los fondos marinos, el polo o los suelos vituminosos. Y este porcentaje de crudo no convencional aumenta, para producir el mismo nivel de barriles. El cénit ha llegado.