La consejera de Cultura de Lakua, Blanca Urgell, advirtió ayer de que una de las condiciones que deben cumplirse para acometer la renovación del acuerdo de gestión del Museo Guggenheim de Bilbo es que el Gobierno de Gasteiz y la Diputación de Bizkaia «recuperen la confianza y la mutua lealtad». Urgell respondió así a una interpelación parlamentaria de la representante del PNV Leire Corrales quien le pidió que explicara qué pasos va a seguir para que el «éxito» del museo perdure en el tiempo.

La consejera subrayó su apoyo al museo y defendió que se debe preparar «en las mejores condiciones» la renegociación del acuerdo de gestión del centro con la Fundación Solomón R. Guggenheim, socio fundador, junto con el Gobierno de Lakua y la Diputación vizcaina.

Según la responsable de Cultura de Lakua, su Departamento es partidario de renovar el acuerdo, aunque para ello precisó que se deben cumplir tres condiciones. La primera reside en recuperar «la confianza y la mutua lealtad» entre las dos instituciones «enfrentadas» para que ambas mantengan una «postura sólida y unida» en todos los aspectos de la negociación; como segunda condición, señaló que se debe evitar que se «enturbie la renegociación con un objetivo distinto al de mantener y mejorar el museo». Por último, abogó por que las dos instituciones citadas analicen «con rigor» el balance de estos años, de cara a «mejorar aún más lo conseguido».

Tras interpelar a la consejera sobre su opinión de las declaraciones realizadas por el vicenconsejero Antonio Rivera en una conferencia internacional en Brasilia, el PNV solicita a Patxi López que «cese a Urgell y Rivera como miembros del Comité Ejecutivo del Guggenheim» en representación del Gobierno de Lakua, al calificar como «indignante que Urgell no haya pedido disculpas a la sociedad vasca por trasmitir una imagen exterior negativa de Euskadi desde su Departamento». Y considera que el museo bilbaino «es un referente internacional y los datos así lo avalan».

Ataque con arma blanca

Ayer, por otra parte, un joven con las facultades mentales aparentemente alteradas dañó con un arma blanca el cuadro «Booz recibe la herencia de Elimelec», del holandés Jan Victors (1619-1676) que actualmente se exhibe en la pinacoteca, según informó el propio Guggenheim. El ataque al óleo tuvo lugar sobre las once y cuarto de la mañana, cuando el joven se abalanzó sobre la pieza utilizando un arma blanca de unos tres centímetros para dañarla.