En total se renovaba un tercio de la Cámara Alta (27 de los 81 escaños) y los socialdemócratas, que ya partían como favoritos, lograron 12 senadores, justo los que necesitaban para alcanzar la mayoría absoluta, según los datos oficiales preliminares divulgados por Radio Praga.

De esta forma, el CSSD contará a partir de ahora con 41 de los 81 escaños de la cámara, lo que podría ralentizar la toma de decisiones del Gobierno, como la relativa a la aplicación de recortes presupuestarios muy impopulares. También podría bloquear la intención del Ejecutivo tripartito de centro-derecha de aumentar en casi 200 soldados el contingente checo en Afganistán, donde ya hay desplegados 535 efectivos.

Los conservadores del gobernante Partido Democrático Ciudadano (ODS) serán la segunda fuerza en la cámara, con 25 senadores. El tripartito en el Gobierno, encabezada por el ODS, controla 118 escaños de un total de 200 en la Asamblea de Diputados (cámara baja).

El primer ministro conservador y líder del ODS, Petr Necas, ha asumido la derrota en el Senado y ha reconocido que supone un varapalo para su partido «con el que se tiene que seguir viviendo».

Política de austeridad

Estas elecciones fueron un test para el Gobierno de Necas y para su política de austeridad. Formado en julio, el gabinete de Necas efectúa importantes recortes en el gasto social y en los sueldos de los funcionarios. Unas 40.000 personas se manifestaron contra estas medidas a finales de setiembre en Praga.

Formada por el ODS, TOP 09 (formación de la coalición de centro-derecha) y el partido centrista Asuntos Públicos (VV), la coalición gubernamental dispone de 118 de los 200 escaños en el seno de la Cámara de Diputados, lo que matiza la fuerza del centro-izquierda en el Senado.

Sometidas a un sistema de mayorías, las elecciones senatoriales parciales checas tiene lugar cada dos años en 27 de las 81 circunscripciones.

En estos comicios, que se celebran tradicionalmente en viernes y sábado, concurren los dos candidatos más votados en la primera vuelta, que tuvo lugar la semana pasada. En aquella ocasión ningún aspirante obtuvo la mayoría simple, que le hubiera dado automáticamente la victoria.

Las elecciones checas han estado marcadas en esta segunda ronda por una bajísima participación, ya que sólo un 25% acudió a las urnas para decidir sobre la renovación parcial del Senado checo.