Los siete rehenes, entre los que figuran cinco franceses, secuestrados por Al Qaeda del Magreb Islámico en algún punto del desierto del Sahara «están vivos», según declaró en Suiza el primer ministro nigeriano de transición Mahamadou Danda citando «contactos sobre el terreno» con los secuestradores sin precisar más detalles de las negociaciones. «Hemos iniciado las negociaciones oportunas», añadió.