El primer ministro Benjamin Netanyahu estaría planificando la extensión de la moratoria total de construcciones en los asentamientos por tres meses a partir de enero, además de otros nueve meses de construcción limitada, para permitir un año de negociaciones intensivas e ininterrumpidas con los palestinos, según afirmó ayer el diario israelí «Maariv».

De acuerdo a este rotativo, después del primer plazo de tres meses, la construcción durante los nueve meses posteriores responderá únicamente a la necesidades de «expansión natural».

El objetivo de esta decisión sería propiciar las condiciones para retomar el diálogo durante un año a partir del próximo mes de enero.

Reiniciado el pasado 2 de setiembre en Washington, el diálogo entre israelíes y palestinos fue interrumpido debido a la negativa de Tel Aviv a prorrogar la moratoria de diez meses sobre la anexión de Cisjordania. Para volver a las negociaciones, los palestinos exigen que el Ejecutivo sionista cambie su postura, algo a lo que hasta ahora se ha opuesto.

El 9 de octubre, la Liga Árabe acordó dar un mes de plazo a EEUU para propiciar un punto de encuentro sobre la construcción de nuevas colonias.

Cambios en la coalición

Netanyahu se ha negado a prorrogar la moratoria, principalmente porque sus socios de Gobierno son contrarios a esta medida. Según el diario, el primer ministro estaría tratando de convencer a los más radicales.

Siempre de acuerdo a este diario, Netanyahu estaría estudiando la posibilidad de integrar en su coalición al partido Kadima (29 diputados) de la opositora Tzipi Livni en sustitución del ultraderechista Israël Beitinou (15), del que forma parte el jefe de la diplomacia de Tel Aviv, Avigdor Lieberman, quien ha mostrado reiteradamente estar totalmente en desacuerdo con una nueva prórroga.