Dos editoriales literarias vascas, Alberdania y Erein; una empresa de distribución de libros, la navarra Bitarte, y otra guipuzcoana especializada en contenidos en internet, Adimedia, se han unido para crear Libenet, una novedosa iniciativa que ofrece consultoría y servicios tecnológicos de digitalización a la industria editorial. Lo que buscan no es únicamente no perder el tren del futuro tras la revolución tecnológica que supone la aparición del libro electrónico, con el cambio radical que ha traído en los sistemas de producción, distribución y venta, sino incluso optar a que la industria editorial vasca llegue a ser pionera en este sector. Para ello, plantean la internacionalización de sus productos y de sus clientes.

Como apuntaba ayer Alexis Mindegia, responsable tecnológico de Libenet, todavía nos encontramos en la «prehistoria» de la digitalización. No se sabe hacia dónde dirigirá sus pasos, ni si desaparecerán los libros en papel, ni en qué derivará el sector -los nuevos soportes, como el iPad todavía están en sus inicios-, aunque, reconoció, que «hay que tomar parte en ello, hay que ofrecerle una respuesta al lector». De hecho, Mindegia apuntó que la empresa de comercio en intenet Amazon reconocía en sus últimos datos la primacía en ventas de los libros electrónicos.

Los servicios

En Euskal Herria, las editoriales ya han comenzado a ofrecer algunos de sus libros en formato digital, aunque de una forma todavía bastante incipiente. Yurre Ugarte, responsable de gestión y de la actividad comercial de Libenet, enfatizaba ayer la idea de que esta nueva empresa busca «dar respuesta a la empresa editorial» con una propuesta innovadora. Con sede en la donostiarra avenida de Tolosa, Libenet ya está en la red (www.libenet.net) y, según explicaron ayer, sus «clientes» serían tanto las propias editoriales, como las librerías, pasando por las bibliotecas públicas o incluso los propios lectores.

Trabajando desde la red, ofrecen tanto servicios de asesoramiento (digitalización de bibliotecas, edición..), como de digitalización en sí, además de e-distribución (es decir, distribución en la red), desarrollo de tiendas on-line y servicios de impresión bajo demanda o POD, algo totalmente novedoso (son pequeñas tiradas).