La patronal europea dibuja la reforma laboral. El capital construye la UE de parados, 23 millones. Los planes de austeridad despiden al salario fijo, aumentan los impuestos tratando de reducir el agujero con nuestro dinero sin intervenir en el sistema financiero.

Merkel anuncia «presupuesto riguroso»: ahorro de 80.000 millones. En Chequia y Polonia los bomberos protestan por el recorte de salarios. En Rumanía los disturbios policiales obligan a dimitir al titular de Interior. Kubilius decreta en Lituania un ejercicio de austeridad y reduce en un 30% las pagas públicas. La recesión activa el «mecanismo de equilibrio automático» sueco.

Reino Unido, más allá de la Thatcher. Unidad de acción sindical contra los planes de establecer la edad de jubilación en los 66 años y achatar el presupuesto en 91.500 millones. Para Seumas Milne se trata de una «salvajada» dispuesta para reordenar la sociedad. El Gobierno tory anuncia el despido de medio millón de funcionarios y fija la reducción de gastos de la reina, respetando, eso sí, el millón y medio de dólares presupuestado para su diamantino jubileo. God save the Queen...

«A los pies de la Acrópolis estamos de huelga». Los trenes se paralizan en contra de su privatización y se clausura el espacio aéreo griego. Los funcionarios secundan: «Ningún sacrificio por la plutocracia». El Gobierno se plantea cambiar presos por dinero.

El ajuste italiano se presenta como ahorro de 24.000 millones en dos años y no toca a los funcionarios. El laboratorio de la Fiat anula los derechos de 5.000 empleados a cambio de no echarlos y consuma su matrimonio con Chrysler. La FIOM convoca a una marcha sobre Roma, la apoyan los centros sociales antagonistas.

El anuncio del aumento de la edad de jubilación colapsa el estado francés por tierra, mar y aire. La policía despeja los depósitos de combustible bloqueados con barricadas. Enésima jornada de huelga, millones en la calle. Los estudiantes se suman: «El que no lucha por las pensiones es que ya está muerto». La prensa difunde terror alrededor de su protesta. «El camino es el de Francia», constata Petras. Sarkozy erre que erre.

El Estado español se supera. La población que vive bajo el umbral de la pobreza alcanza el 20,8% y de nada sirve estar por encima de la media de la UE en riqueza por habitante (?) o que el patrimonio que gestionan los fondos de pensiones privados casi alcance el montante de los públicos. El bufón PSOE distrae y tacha de «inmoral» el sueldo de Cospedal. Caldera manifiesta que la remodelación del gabinete Zapatero cuenta con el favor de «amigos, familiares y vecinos», y el nuevo experto en la materia tienta con políticas activas de empleo a sindicatos serviles que utilizan la huelga como parte del negocio. Ecuación Rubalcaba: austeridad, reformas y cohesión social igual a X de acuerdo con el PP sobre la reforma de las pensiones más pacto energético a 25 años. La reina de los españoles preside la Fiesta de la Banderita como una gran dama de la Cruz Roja. Unos tunos le cantan «Clavelitos» y un grupo de escolares le entrega una loa a su labor benéfica escrita por su profesora. No es casual que la simbología caduca se reactive en tiempos de crisis. Si Marx levantara la cabeza...