El presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbo, José Ramón de la Fuente, compareció ayer para defender que la extracción de fondos marinos frente a la playa de La Arena está avalada por diversos informes técnicos y científicos, saliendo así al paso de las denuncias de vecinos y ecologistas que auguran un gran impacto medioambiental.

De la Fuente consideró que se han vertido «bastantes inexactitudes», lo que mantiene «a la opinión pública confundida». Las palabras más duras fueron para los opositores, a los que les dijo que han mantenido una actitud «muy poco responsable», ya que, tras cuatro años de exposición pública en la que «sólo hubo una alegación técnica de la Capitanía Marítima», por cuestiones de fondeo de los buques, ha sido ahora, cuando tienen todos los permisos, cuando han comenzado las protestas.

Explicó que estudios elaborados por el Instituto de Hidráulica Ambiental de la Universidad de Cantabria y de Azti-Tecnalia concluyen que la aparición de piedras en la playa de La Arena nada tiene que ver con el dragado y sí con la erosión propia de los temporales en el Cantábrico. De la Fuente aclaró que esta situación ya se vivió en 2001 «e incluso, en 1965, antes del inicio de las obras del Abra exterior».

«Las críticas vertidas a dicho proyecto carecen de base científica y están basadas en consideraciones personales, ya que no se han producido daños a la playa ni riesgos de contaminación», remarcó.

El responsable del Puerto señaló que finalmente extraerán en las próximas semanas 2,4 millones de metros cúbicos, que sumado a los 2,3 millones dragados en la primera fase, de diciembre de 2009 a febrero de 2010, harán 4,7 millones de metros cúbicos de relleno para los muelles AZ-3 y AZ-2, adosados al dique de Zierbena. En 2005, tras la recomendación de Costas de cambiar la cota de extracción de -19 a -25, se pasó de 10 millones a 6, y ahora, con el nuevo estudio de Azti-Tecnalia, se queda en 4,7, insuficiente para ellos.

Los técnicos, según desveló De la Fuente, aseguran que así se dejará un metro de espesor de arena en el fondo y la recuperación de la especies betónicas propias del sustrato será más rápida. El «inconveniente», subrayó, es que la Autoridad Portuaria no tiene asegurados los rellenos suficientes para colmatar los nuevos muelles, lo que ocasionará retrasos.

Tras los 2,4 millones de metros cúbicos depositados en la primera fase, se concluyó el muelle AZ2, aunque para el AZ3 no habrá suficientes toneladas de escombros, lo que ha obligado a los responsables portuarios a buscar tierras sobrantes en otras obras públicas que sobran. El director del Puerto, José María Pico, citó que Abra Industrial, por ejemplo, ha aportado en los últimos años 2 millones de metros cúbicos y que mantiene contactos con otras empresas para que puedan enviar sus sobrantes, con los consiguientes certificados medioambientales, a Zierbena.

Ante el anuncio de la Plataforma de usuarios de la Playa de La Arena, aunque no lo citó expresamente, de que podrían impulsar iniciativas ante los juzgados si se reanuda la extracción de arena en la mayor cantera submarina de la península Ibérica, el presidente advirtió de que un nuevo retraso, o paralización, de las obras supondría para el Puerto un gran quebranto.

Tras la insistencia de los medios, dijo que el retraso en la puesta en marcha de los nuevos puntos de atraque y la resolución del actual contrato con la firma que ejecuta los polémicos dragados en el Abra exterior podría acarrear «más de 100 millones de euros de pérdidas».