Victoria sobre el Alicante
Conseguir tanto con tan mal juego es casi imposible
Los de Katsikaris desperdiciaron una renta de 18 puntos y salvaron los muebles gracias a los tiros libres.
BIZKAIA BILBAO BASKET 71
ALICANTE 59
Arnaitz GORRITI
Es cierto que Bizkaia Bilbao Basket firmaba tras la victoria de ayer su mejor comienzo desde que está en la Liga ACB. Es cierto que los de Fotis Katsikaris dominaron el marcador en todo momento, salieron a la contra en numerosas ocasiones y, a poco que atinaron, llegaron a tener hasta 18 puntos de ventaja.
Pero tampoco hay que ocultar que los hombres de negro se pasaron más de 10 minutos sin lograr una canasta en juego, encajando un horrendo parcial de 5-19, con el que se pasó del 51-33 al 56-52. Tampoco hay que ocultar que en el último período sólo se anotaron dos canastas -un tiro de media distancia de Hernández-Sonseca y un triple de Warren- y que mientras tanto se vivió de los tiros libres que lograban arrancar Mumbrú y los mencionados Warren y Hernández-Sonseca. Sacar más con menos es imposible.
Pero una victoria es una victoria, y también hay que reconocer que en los peores momentos del ataque de los hombres de negro éstos se aplicaron atrás -el Alicante también puso de su parte en el despropósito ofensivo-, cosa que no sólo es exigible, sino estimable.
Bloqueados ante la nada
Sin hacer grandes alardes pero con las ideas claras, cargando el juego interior y buscando defender fuerte y salir en transición, los de Katsikaris arrancaban con fuerza el partido. Banic aprovechaba la desidia defensiva de los alicantinos y Jackson y Mavroeidis sumaban también a base de robos y rebotes de ataque, respectivamente.
Después del 24-14 con el que se terminó el primer período los hombres de negro amagaron la ruptura adelantándose 41-23 tras un acertado palmeo de Mavroeidis. Doellman acaparaba demasiados tiros en la parte rival y las faltas lastraban el juego de Stojic y Pape Sow.
Pero los árbitros, que tampoco estuvieron sembrados, volvieron a meter a los visitantes en el duelo tras señalar una antideportiva a Paco Vázquez. Ello propició un parcial de 1-8 que dejó el duelo 42-31 al descanso.
Hernández-Sonseca irrumpió tras el descanso, y el primer triple, de la mano de Jackson, y un nuevo enceste de Banic, ampliaron la ventaja al consabido 51-33.
Pero Óscar Quintana se la jugó con una zona 2-3. Una zona mal ejecutada, pero que cortocircuitó un ataque bilbaino que perdió balón tras balón, facilitando la remontada alicantina de la mano de Doellman y los bases Heurtel y Llompart.
El cuarto final fue un compendio de nervios y errores. Afortunadamente, las faltas visitantes allanaron el camino a los bilbainos, de modo que lograron reabrir la diferencia hasta el engañoso 71-59 final.
Hasta 49 rebotes, 21 en ataque, capturó el Bizkaia Bilbao Basket en la jornada de ayer; ésa fue la cara de la moneda. La cruz fueron las 19 pérdidas de balón y el horrible porcentaje de triples, con 3 aciertos de 11 lanzamientos.
Un triunfo es un triunfo y a ello hay que agarrase. Ésa fue la filosofía de un Fotis Katsikaris que reconoció errores, pero que quiso mostrar la parte positiva; esto es, la buena defensa.
«Ha sido un partido muy complicado. Tenemos que corregir cosas como las pérdidas de balón y he visto al equipo por momentos ansioso. Pero hemos defendido bien y por ahí controlamos el partido», dijo.
Óscar Quintana se quejó de la diferencia de tiros libres favorable a los locales. A este respecto, Katsikaris replicó que «ya me gustaría recibir este arbitraje fuera de casa». A. G.