FÓRMULA UNO Gran Premio de Brasil
Red Bull permite competir a Vettel
A pesar de que Mark Webber era el mejor colocado de cara al campeonato, Red Bull prefirió no intervenir en la lucha de los dos compañeros y Vettel lideró el doblete ascendiendo hasta la tercera posición. Alonso, tercero, se vio descolgado de la lucha al inicio.
Ander GARTZIA
El mundial de pilotos de la Fórmula Uno se queda en un pañuelo tras el doblete de Red Bull liderado por Sebastian Vettel, que dejó bien clara la postura adoptada por la escudería austríaca ante las especulaciones referentes a los posibles órdenes de equipo, tras la sombra que planeaba sobre los favoritos tras el revuelo que originó el adelantamiento de Alonso a Massa en Alemania.
En cuanto el piloto alemán se deshizo de Hulkenberg en la primera curva y tuvo la pista libre, no dudó lo más mínimo en enfilar su monoplaza a la victoria y mirar por el retrovisor cómo su compañero de equipo, Mark Webber, se dejaba por el asfalto unos valiosos puntos de cara al título.
Y es que tras un inicio dubitativo de carrera de Alonso, en el que el asturiano perdía la estela de los hombres de la bebida isotónica mientras se rompía los sesos tratando de averiguar por dónde podía adelantar a Hulkenberg, el gran beneficiado del triunfo alemán fue precisamente el piloto de Ferarri. Gracias al segundo puesto del australiano, el bicampeón mundial sigue teniendo el título en su mano, ya que depende de sí mismo para alzarse con la corona en el Gran Premio que se celebrará la semana que viene en Abu Dhabi.
Quien se descuelga casi definitivamente de la lucha por el campeonato es McLaren. Jenson Button dijo adiós definitivamente a sus remotas opciones, a pesar de completar una gran carrera remontando desde la undécima hasta la quinta plaza, mientras que su compañero de equipo se aferra a un clavo ardiendo tras su cuarto puesto de ayer. A pesar de que se esperaba un Hamilton agresivo en busca de arañar puntos a sus rivales más directos, la realidad es que el británico se vio superado por Alonso dos vueltas después de que el semáforo colorado se pusiera en verde. El británico perdió todo un mundo tratándose de zafar de un Hulkenberg muy defensivo, donde perdió prácticamente la totalidad de sus opciones.
Entrada del coche de seguridad
Sin embargo, un accidente del italiano Luzzi y la posterior aparición en escena del safety-car, dieron una segunda oportunidad a Alonso y a los británicos de acercarse a unos Red Bull hasta entonces intratables, aunque no fuese en realidad una situación tan ventajosa, ya que entre éstos y los dos primeros colocados se encontraban estancados varios pilotos con vuelta perdida.
En las últimas vueltas Alonso pudo acercarse algo más a Webber, pero nunca pudo inquietar al australiano, que terminó con dos segundos y medio de margen sobre el ovetense, que llegaba a Brasil con once puntos de margen que ahora se reducen a ocho. Hamilton, por su parte, aprovechó la salida del coche de seguridad para cambiar los neumáticos, pero no pudo dar caza al piloto de Ferrari.
Tras copar las dos primeras posiciones del G.P de Brasil el equipo Red Bull conquistó por primera vez en su historia el título de constructores. Ferrari es la escudería con más títulos en su haber (16), seguido por Williams (9) y McLaren (8).
Aunque a falta de una última prueba la cosa sigue siendo de cuatro, algo que ocurre por primera vez en los sesenta años que han transcurrido desde la creación del Campeonato del Mundo de Fórmula Uno, el único que depende de su resultado es Fernando Alonso.
Al margen de una hipotética victoria de Webber, al piloto de Ferrari le bastaría con acabar la última prueba en las dos primeras posiciones, mientras que si es Sebastian Vettel -a 15 puntos de Alonso- el que repite su triunfo del pasado año, para lograr su tercer campeonato al asturiano le bastaría el quinto puesto, aunque los Red Bull lograran un nuevo doblete como el de ayer.
En caso de que Fernando Alonso no terminara entre los diez primeros puestos, que son los que dan puntos, Mark Webber debería terminar entre los cinco primeros para conseguir su primer campeonato.
Vettel, por su parte, está obligado a terminar entre los tres primeros en caso de que no puntuara Alonso, mientras que las posibilidades de Hamilton, a veinticuatro puntos del actual líder del mundial, son prácticamente nulas. El piloto británico necesita una carambola que se antoja inverosímil: para que Hamilton lograra su segundo título debería lograr la victoria, que Alonso no terminara entre los diez primeros, que Webber quedara noveno y Vettel como mucho fuera tercero.
El mismo Hamilton reconoció al termino de la prueba que necesita «un milagro» en la última prueba para lograr el Mundial.
GARA
Tras la sorpresa en la sesión clasificatoria del sábado se preveía que Huljkenberg podía eregirse como juez entre los candidatos al triunfo. Y aunque no deslumbró mucho, el tapón que hizo a Hamilton y Alonso fue decisivo para que los Red Bull se escaparan.
