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Cuatro y Medio

Como un martillo pilón

Dos años después, Barriola vuelve a la liguilla de semifinales tras imponer su juego a bote a Julen Retegi.

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BARRIOLA 22

RETEGI BI 14

Jon ORMAZABAL

Dos años después, Abel Barriola vuelve a la liguilla de semifinales del Cuatro y Medio, después de que, con su martillo pilón, terminara con la resistencia de un Julen Retegi que ha sido el único cabeza de serie que no ha podido mantener este privilegio. Como mal menor, al delantero navarro le queda el haber sido el perdedor de cuartos que más tantos ha conseguido realizar, lo que le daría la opción de entrar en cuartos el año que viene en caso de renuncia de alguno de los cabezas de serie, como sucedió con el propio Barriola y Berasaluze VIII el año pasado.

Sabiendo desde el jueves que con el material presentado le iba resultar muy complicado sacar de la cancha a su rival con brillantes pelotazos, el zaguero de Leitza se puso el mono de trabajo y se dispuso a descomponer la resistencia de su rival a base de insistencia, de pegar y pegar largo, arrimando a la pared izquierda.

Eso sí, como los materiales más fuertes, Julen Retegi opuso mucha resistencia de inicio y para nada dejó moldearse tan fácil. De hecho, en un inicio de partido muy igualado, disputado y con tantos muy peloteados, Retegi Bi tomó una bonita renta de cinco tantos, 1-6. Además de defenderse con solvencia, el delantero iruindarra movió bien a Barriola en la cancha, logrando equilibrar unos pronósticos que de inicio le eran muy adversos.

Sin desfallecer

Sin embargo, como ya hiciera ante su paisano Oinatz Bengoetxea, si algo tuvo bueno ayer Abel Barriola eso fue una fe inquebrantable a su filosofía y a la idea con la que llegó al frontón. Lejos de desfallecer, el zaguero de Leitza continuó siendo fiel a su idea, ajustando sus pelotazos al límite del acotado e intentando que su rival jugara con los pies a partir del cinco.

Poco a poco y a base de insistir e insistir, los pelotazos de Abel Barriola fueron minando la resistencia de Julen Retegi, que comenzó a acumular un error tras otro, hasta ceder la iniciativa en el marcador al zaguero.

Tras el empate a seis, Julen Retegi consiguió otro par de tantos, pero enseguida se estancó ante un Abel Barriola que fue poco a poco a más, sobre todo porque comenzó a hacer daño con su saque. Siendo un arma importante en su juego, hasta entonces no le había sacado demasiado provecho a la jugada inicial, pero a partir del tanto once, encadenó cinco prácticamente consecutivos con los que terminó ablandando a su rival.

A pesar de que la dinámica en la que se vio envuelto no le era nada favorable, el delantero iruindarra no supo proponer otra, no veía la forma de arriesgar y un parcial de 15-3 adverso le dejó sin ninguna opción, por mucho que una tardía reacción le permitiera maquillar su derrota y conseguir un tanto más que el conseguido hace dos años en el mismo escenario ante el mismo rival.

A falta de confirmación de sedes, la liguilla de semifinales arrancará con un Martínez de Irujo-Titín III, probablemente en el Adarraga, y un Abel Barriola-Sebastien Gonzalez.

 

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