Los Angeles Lakers y New Orleans Hornets, ambos equipos pertenecientes a la Conferencia Oeste, son los líderes tras los primeros ajustes de la temporada. Y lo son sin conocer la derrota. Algo normal en el caso de los actuales campeones de la competición, ya que su calendario ha sido bastante benévolo, con rivales de escasa entidad y con cinco de los siete partidos disputados en su propia cancha.

El último triunfo sumado por los californianos llegó la madrugada del lunes ante Portland Trail Blazers por 121-96. Tras un inicio demoledor, los Lakers se pusieron 13 arriba y el partido fue un paseo para los de amarillo. Gasol obtuvo un triple-doble (20 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias) y Lamar Odom ayudó con un doble-doble (21-12), en un partido en el que Kobe Bryant estuvo relajado y apenas participó, mientras que Ron Artest secó a Rudy Gay, la gran estrella de los Blazers.

Más sorprendente que el de los Lakers es el caso de los Hornets de Nueva Orleáns, los otros imbatidos del Oeste y de la liga. Con el oficio por bandera, la franquicia de Louisiana ha conseguido seis victorias de una tacada y parece que será una de las escuadras que llevará el ritmo de las primeras semanas.

Los Hornets, que fueron uno de los peores equipos de la pretemporada, se han impuesto a Milwaukee Bucks en dos ocasiones, a los maltrechos Houston Rockets y a tres gallitos: Denver Nuggets, San Antonio Spurs y Miami Heat.

Mientras tanto, en la Conferencia Este ya no existen imbatidos, pero la lógica aplastante domina la tabla clasificatoria y Atlanta Hawks, Boston Celtics, Orlando Magic y Miami Heat son los únicos con un balance positivo.

Fueron precisamente los Hawks de Atlanta los últimos del Este en conocer la derrota. Phoenix Suns se aprovechó de un gran trabajo de su segunda unidad, que sumó 46 tantos, para llevarse la victoria del Phillips Arena por 118-114.

Pese a que los Suns reventaron el marcador a su favor en el segundo cuarto, los Hawks reaccionaron mediado el tercer período para equilibrar la contienda. Atlanta machacó la errática defensa de Phoenix con varios triples consecutivos con Mike Bibby, Joe Johnson y Jamaal Crawford como principales protagonistas. Una jugada de cuatro puntos de Crawford apretó el marcador antes del último cuarto, 90-88.

El factor Steve Nash

Pero cuando Atlanta estuvo ante el momento de la verdad, no supo llevarse el encuentro. Fue entonces cuando apareció Steve Nash asumiendo hasta cuatro tiros consecutivos para mantener a su equipo a flote. En otra penetración, Nash dobló el balón para que Jared Dudley anotase a placer.

Buenas acciones del repescado Josh Childress y de Hakeem Warrick llevaron a los Suns a obtener distancias de cinco puntos a falta de pocos segundos. Atlanta buscó una nueva remontada pero en el momento clave Phoenix sorprendió con un balón interior a Channing Frye, que anotó con maestría para 114-112 y 24 segundos de juego.

Nash fue el responsable de asumir el intercambio de tiros libres y con una serie de cuatro de cuatro mantuvo la distancia para el 118-114 final a favor de Phoenix.