Grupos opositores al TAV entregaron este jueves las alegaciones puestas a las obras del tren de los tramos Urnieta-Hernani, Andoain-Urnieta y Tolosa-Hernialde en la subdelegación del Gobierno español en Donostia. Avisan de que aún hay opción de entregar más hasta el 15 de noviembre. Los opositores recordaron que la construcción del TAV ocasionará «graves impactos» medioambientales tanto en acuíferos como en los cursos de agua o en zonas agrarias y alertaron que la llegada del tren «fomentaría la expansión metropolitana», hasta el punto de trasladar el centro de Donostia hasta Hernani a lo largo del Valle Urumea ¯tal y como recoge el último informe del Plan Territorial Parcial¯.

Con la entrega de estas alegaciones, los opositores al TAV denunciaron que en estos tramos ha habido «una intención visible de ocultar la información» por parte de Eusko Trenbide Sarea y de los Ayuntamientos de Tolosa y Andoain. Relatan, además, que en Tolosa no han difundido ninguna información desde el año pasado; y que, por otra parte, a los ayuntamientos de Hernani y Hernialde no ha llegado la información. Calculan que en los tramos mencionados en el presupuesto base asciende a 4.790 euros por persona. «Es todo un `pastel' que se reparten entre unas cuantas empresas», decían. En el tramo Tolosa-Hernialde el TAV ocasionaría la demolición de tres casas, con 50 propietarios. Asimismo, en Astigarraga la «gigantesca» estación se llevaría a cabo sobre el cauce del río, «destruyendo completamente el cauce fluvial natural y sus márgenes».

En cuanto al tramo Andoain-Urnieta, destacaron el impacto en cuanto a los arroyos y manantiales se refiere. «Las obras del segundo cinturón ya han supuesto la desaparición de varios manantiales cercanos», decían. Por tanto, advierten de que las obras del TAV en los manantiales y fuentes que se alimentan de aguas procedentes de Buruntza y Belkoain sería «demoledor» y «conllevaría su total destrucción». Así subrayaron que la tierra agraria «está siendo destruida, fragmentada y hormigonada», como ejemplo citaron la vega de Martutene como «el tramo más castigado, a pesar de ser una de las mejores zonas agrarias de Gipuzkoa».