El presidente del Banco Sabadell, José Oliu, afirmó que está dispuesto a realizar operaciones conjuntas con Kutxa y BBK, que son en la actualidad socios del banco, tras la absorción del Banco Guipuzcoano por el grupo catalán. La Quinta Jornada de Negocio Internacional, que organizó el Sabadell en la Alhóndiga, sirvió de escenario para que Oliu explicara los planes que tiene para desarrollar en los próximos dos o tres años, a la vez que indicó que el sistema financiero vivirá cambios profundos que alumbrarán nuevos bancos que serán propiedad de las cajas, como ya está exigiendo el Banco de España. A su juicio, en algún momento tendrán que recurrir al mercado para «ceder parte de su capital». En ese momento, es donde se puede producir una operación conjunta del Banco Sabadell con BBK y Kutxa, como explicó.

Guipuzcoano

José Oliu destacó la respuesta «positiva» a la integración del Banco Guipuzcoano. «El éxito -afirmó- nos ha sorprendido». El objetivo del Sabadell con esta operación es duplicar el negocio en la CAV y rechazó que se vayan a cerrar oficinas.

Con motivo de este acto, LAB colocó carteles exigiendo el mantenimiento del empleo ya que la OPA del Sabadell sobre el Guipuzcoano conlleva, según lo anunciado, la destrucción de 150 empleos. Los carteles fueron retirados por el Ayuntamiento de Bilbo. Se conoce que ya han empezado a mover a personal de los Servicios Centrales del Banco Guipuzcoano y han iniciado las ofertas de prejubilaciones.

Para LAB, «se trata de una operación económica que tiene graves repercusiones en Euskal Herria y más en concreto en Gipuzkoa. Quienes han creado la actual crisis no dudan en aprovecharse para continuar haciendo negocio, aunque sea a costa de aumentar el número de parados y paradas. La Banca, en este caso el grupo presidido por el señor Oliu no quiere ni negociar con los representantes legales de la plantilla el futuro de la misma».

LAB también criticó que se pretende «imponer un acuerdo de prejubilaciones antidemocrático y en minoría, que pretende que las y los empleados que tienen derecho a complemento de pensiones prácticamente renuncien al mismo o lo dejen en su mínima expresión».

Ante la presencia del presidente del Sabadell en Bilbo, LAB denunció, asimismo «la práctica antisindical y antidemocrática que está llevando a cabo», y criticó la «irresponsabilidad de BBK y Kutxa que, pudiendo haber actuado en defensa del empleo, han preferido mirar para otro lado».