Los magistrados del Tribunal de Baiona se han unido a las protestas que hace unas semanas anunciaron los abogados de la misma instancia judicial al objeto de denunciar la falta de medios para aplicar la legislación.

A diferencia de otros tribunales, donde los letrados han optado por un movimiento de huelga, en Baiona magistrados, abogados y funcionarios de Justicia han decidido concretar su denuncia por otros métodos. Así, aplicarán a la letra lo requerido por la circular denominada Lebranchu que estipula que en la jurisdicción penal no se pueden llevar a cabo audiencias de más de seis horas seguidas. Además, como más tarde el 1 de diciembre, los jueces exigirán la presencia sistemática de un secretario en las audiencias civiles donde sea obligatorio «para que se cumpla la legalidad».

Los magistrados han manifestado que, «en realidad, no se trata de una huelga de celo ni de bloquear la institución sino de de aplicar lo establecido en la ley» y alertar de que no pueden seguir así. «Nos exigen que vayamos rápido. Lo importante es la cantidad y esto no es posible». Los abogados también han hecho saltar la alarma por la reforma de la detención y la falta de medios para garantizar los turnos de oficio y han llamado a la huelga en las comparecencias de procesados que se reconocen previamente culpables.