OSASUNA Tercer triunfo consecutivo en El Sadar
Más suspense y una pizca de eficacia
Como los rojillos fuera de casa, el Sporting llegó, hizo méritos y mereció más, pero no supo concretar. En cambio, los de Camacho se sacaron de la chistera una contra, jugada poco habitual en ellos, para llevarse un partido en el que Puñal cumplió su número 400.
Natxo MATXIN
Ya resultaba bastante raro disfrutar con cierta comodidad de dos victorias caseras consecutivas como para que se produjese una tercera con la misma tranquilidad. Esta vez tocó sufrir, pese a que el Sporting arribaba a Iruñea con notables bajas, pero con la lección bien aprendida de cara a contrarrestar el juego rojillo. Durante gran parte del encuentro, Preciado le ganó la partida a Camacho, pero esta vez la pegada estuvo del lado del técnico murciano.
La escuadra asturiana diseñó un entramado en la medular que no sólo anuló a los locales, sino que les quitó el balón y superó a sus pares con una sobrada facilidad como para asomarse hasta la portería de un Ricar- do que, paradójicamente, no tuvo que intervenir. Carmelo apoyaba más a sus pivotes de lo que lo hacía Soriano y las alas sportinguistas -Novo y De las Cuevas- también tendían a ayudar lo suyo en posiciones interiores. Demasiado tajo para un Puñal que debía multiplicarse en su partido 400 como rojillo y para un Nekounam que pareció acusar la pachanga internacional de entre semana.
El Sporting no sólo achuchaba en la circulación del cuero y cada vez que superaba la barrera formada por los dos mediocentros rojillos, sino que destilaba peligro en todas las jugadas a balón parado. Carmelo y José Ángel se mostraron como dos hombres muy válidos para este menester, que para sí los quisiera el conjunto navarro.
Sus precisos envíos hicieron sufrir sobremanera a una zaga rojilla que acusó la ausencia de Natxo Monreal, un jugador que no sólo cubre su banda sino que participa de manera constante en las ayudas a su central más próximo, puesto en el que ayer le tocó desenvolverse a Miguel Flaño, quien echó de menos el apoyo del de Eskirotz en un buen número de lances.
Con una zaga nerviosa a la par que poco solvente y una medular sin ingenio, el ritmo cardíaco del personal se aceleró todavía más cuando el larguero escupió un zapatazo de Novo en el 21. Los fantasmas de hace dos temporadas -los asturianos ganaron 1-2- volvieron a emerger y sólo el intermitente Nekounam animó a la grada con un disparo lejano y un cabezazo centrado que sacó Juan Pablo.
Contra de oro
Es más, la peligrosa dinámica se acentuó con los primeros compases de la segunda mitad con un Sporting dispuesto a acogotar a los navarros. Tanto, que en un corner a su favor descuidó la retaguardia de tal manera que hasta Osasuna fue capaz de inventar un medio contragolpe -faceta en la que se prodigan muy poco los de Camacho- que valió su peso en oro.
Leka y Soriano trenzaron el decisivo lance para que Masoud le pusiera el lazo a otra sobresaliente actuación que -y es lo mejor- viene a confirmar la regular trayectoria del persa desde que su técnico le concediera la titularidad y que, por fin, parece haberse acoplado a las maneras del fútbol europeo.
El gol de Masoud adquiere mayor valor todavía si se tiene en cuenta el exigente calendario rojillo de las semanas venideras -un tropiezo hubiera hecho aflorar nuevamente los nervios-, posibilita encarar con mayor desahogo el complicado derbi del próximo domingo y permite alejar a un rival directo hasta los cinco puntos de distancia. El saludo final de los jugadores a la grada atestiguó tal importancia.
Pase lo que pase con el Getafe-Zaragoza que se disputará hoy, Osasuna sabe que está a cinco puntos de los puestos de descenso, una importante brecha para los de Camacho. La escuadra navarra ocupa momentáneamente la undécima plaza, a un punto del Athletic.
El técnico rojillo, José Antonio Camacho, vio a su equipo con dos caras bien diferentes, dependiendo de ambas partes. Así, no le dolieron prendas en reconocer que sus pupilos en la primera mitad «salieron sin intensidad y un pelín relajados. El Sporting no se ha encontrado al Osasuna fuerte que todos esperábamos y cuando no salimos metidos en el partido sufrimos mucho, tal y como se ha podido comprobar».
Por contra, en la segunda «ha variado todo y el equipo ha saltado como debe, los chavales se han entregado y hemos protagonizado tres o cuatro detalles, cuando de normal deberíamos haber hecho once». En uno de ellos llegó la diana que decantó el choque, a raíz de que «teníamos estudiado al Sporting y la jugada ha salido bien porque la habíamos trabajado mucho entre semana».
El triunfo fue muy peleado, en cualquier caso, porque «enfrente había un rival muy competitivo y, cuando ganas este tipo de partidos, le das más importancia», amén de que era frente a un rival directo en la pelea por la permanencia, pero «todos los puntos son puntos y los encuentros hay que jugarlos. Cuando menos te lo esperas, un compromiso difícil lo sacas adelante», en referencia al complicado calendario que se le avecina a Osasuna en las próximas semanas.
El técnico de Cieza también habló sobre el mejor sobre el césped, el iraní Masoud. Es patente que ha mejorado notablemente, si bien «hay algunas cosas que no las tiene todavía asumidas, ha jugado en ligas donde tenía más libertad a la hora de moverse por el campo y aquí le hemos dicho que dé la gran calidad que tiene de tres cuartos de campo hacia adelante».
Por su parte, el entrenador sportinguista, Manolo Preciado, reconoció que los suyos deben «ser más rigurosos» en determinados lances, caso del que desequilibró la balanza del lado navarro, «porque deberíamos haber hecho una falta táctica». En cualquier caso, valoró la actitud de su escuadra, «que ha dado la cara, llegando más que el rival, pero a Osasuna es difícil meterle mano en su casa porque es muy práctico y decide por pequeños matices», analizó. N.M.
El equipo juvenil de Liga Nacional fue el único que falló al perder en Tajonar con la Peña Sport (2-3), mientras que el de División de Honor superó al Danok Bat (3-1). El Infantil A empató en Cascante (1-1) y el resto de conjuntos sacaron adelante sus compromisos.
Los medios asturianos le recordaron al técnico del Sporting, Manolo Preciado, que su equipo lleva una nefasta estadística: ha ganado dos encuentros de los últimos 23 disputados. Tras jugar en El Sadar, los rojiblancos siguen sin vencer a domicilio en lo que va de temporada.
Apenas duró un cuarto de hora sobre el terreno de juego. El tiempo que le costó a Carlos Aranda resentirse de una contusión en el gemelo izquierdo. El delantero malagueño no participó en el partidillo del sábado como precaución, si bien Camacho no dudó en alinearlo de inicio.