El secuestro de toda la Humanidad
«Skyline»
La moda de las películas de bajo presupuesto que hacen dinero parece tocar techo con «Skyline», que no ha sido la sorpresa que sus creadores esperaban. Los hermanos Strause sólo dominan los efectos especiales.
M.I. | DONOSTIA
El fenómeno denominado dentro de la industria de Hollywood sleeper es acariciado por todos los que con un escaso presupuesto quieren competir en la taquilla con las grandes producciones. Pero cada vez es más difícil dar la sorpresa, aunque técnicamente pueda parecer sencillo. Así debieron de creerlo los hermanos Strause cuando vieron cómo Oren Peli se metía al público en el bolsillo con una videocámara y poco más en «Paranormal Activity». Ellos pensaron que, siendo unos genios de los efectos especiales, les bastaría con rodar por unos miles de dólares una película de ciencia-ficción que diera la impresión de haberse hecho con muchos millones. Había precedentes recientes en el género, ya que el sudafricano Neill Blomkamp lo logró con «District 9».
Y, en efecto, los Strause han realizado una película con unos efectos de primera por un presupuesto de segunda. Pero ahí se acaba todo, porque se les ha olvidado el detalle de que para hacer cine hay que saber narrar, contando con un guión y unos actores capaces de dramatizarlo. Se han agarrado a la práctica cada vez más extendida de obtener unas imágenes impactantes suficientes para llenar un trailer, mediante el cual generar la expectación necesaria para que el público acuda a los cines el primer fin de semana. Claro que si esos espectadores se sienten decepcionados y, junto con los comentarios de la crítica, desaniman al resto, la película ya no aguantará más de una semana en cartel.
Por otro lado, si lo efectista está en los avances colgados en internet, el efecto sorpresa siempre será menor. Ya se ha podido ver antes del estreno a las gigantescas naves invasoras succionando cual aspiradores a los habitantes de la Tierra, en una imagen dantesca que recuerda a un cuadro de El Bosco. Se supone que ésa es la principal novedad argumental, porque esta vez los alienígenas no se conforman con invadir la Tierra, sino que secuestran a toda la humanidad. Los cuerpos de los habitantes del planeta son abducidos en masa, como las reses camino del matadero. Los que tratan de ponerse a salvo forman parte de un reparto impersonal, por lo que no consiguen dar una dimensión memorable a la función.
Los cuerpos de los habitantes del planeta son abducidos en masa, como las reses camino del matadero. Los que tratan de ponerse a salvo forman parte de un reparto impersonal, por lo que no consiguen dar una dimensión memorable a la función.
Dirección: Colin Strause y Greg Strause.
Guión: Joshua Cordes y Liam O'Donnell.
Intérpretes: Eric Balfour, Scottie Thompson, David Zayas, Donald Faison.
Fotografía: Michael Watson.
Música: Matthew Margeson.
País: EE.UU., 2010.
Duración: 92 minutos.