Antonio Zurera y Ángel Izquierdo ya consiguieron el Goya de Animación hace siete años con «Dragon Hill», una creación fantástica que ahora da paso a una libérrima versión del clásico cervantino. Para realizar «Las aventuras de Don Quijote» han combinado técnicas de animación en 2D y 3D, con la intención de actualizar las míticas figuras del caballero andante y su fiel escudero, que toman las formas animales de un lince y un ratón. La factura vuelve a ser competitiva, gracias al trabajo realizado en los estudios Milimetros Feature Animation de Las Rozas.

Los escenarios explotan la dimensión onírica del texto original, imaginando lo que sería el universo de la creación literaria, viajes espaciales y paseos por la luna, o batallas con gigantes de aspecto robótico.