Las cimas del Ernio o el Adarra amanecieron ayer blancas. Lo mismo que el Ganeran o el Ganekogorta. O el Gorbeia. Igual de precioso estaba el Aloña visto desde Oñati. Era la postal nevada que dejó la primera entrada polar de la temporada, con espesores de hasta 13 centímetros en Orreaga o de 10 en Abaurreagaina. Pero de los 600 metros hacia abajo, nada de nada, excepto en zonas de Nafarroa. Y es que las temperaturas no bajaron tanto, con registros mínimos que no cayeron por debajo de los 0º. Sí lo harán, en cambio, a partir de mañana, ya que esta próxima madrugada se prevé gélida, con heladas generalizadas para el domingo, sobre todo en el interior de Euskal Herria, y nevadas débiles, de nuevo, por encima de los 600 metros.

Ayer, una de esas periódicas encuestas que sirven para evitar hablar del tiempo en el ascensor, aseguraba que «los vascos» dedicamos la mañana de los domingos -amén de levantarnos dos horas más tarde- a hacer las tareas del hogar, practicar deporte y tomar unas cañas. Pues esta próxima jornada dominical, mejor quedarse un rato más en casa y si salimos, hacerlo abrigados. Eso sí, en la zona del litoral, mejor llevar el paraguas.

El tiempo se complica el lunes

Aunque los servicios de emergencia tengan activadas las alertas amarillas para este fin de semana, lo peor parece que se avecina para el lunes. A día de ayer, los modelos dejaban entrever el riesgo de una ciclogénesis, con lo que la lluvia y el viento parecen casi asegurados casi para despedir noviembre.

Joseba Areitio, de la asociación meteorológica Amillena, lo avisaba ayer en su blog. «Tras un fin de semana de tiempo frío y variable, el lunes se complicará de verdad el tiempo». Ciclogénesis -es decir, una depresión- que, aunque no explosiva, sí traerá fuertes vientos.

Este meteorólogo advierte de que se trata «más de un aviso para su seguimiento que de una predicción cierta», pero a día de ayer, el pronóstico para el lunes apuntaba a que «tendremos buen tiempo por la mañana con heladas, pero rápidamente se nos echará encima un frente de abundantes precipitaciones, con fuerte viento del sureste y nieve en cotas que podrían ser de unos 500 metros, aunque podría nevar en puntos más bajos del Valle del Ebro».

Tras el paso de la depresión, y según esa misma previsión, los vientos girarían al noroeste y seguiríamos la semana con ambiente frío e invernal.

Mucha lluvia en el sur vasco

Un aviso de ciglogénesis que corroboraba ayer a GARA Margarita Martín, responsable de la agencia Aemet en la CAV. «Si se cumple lo previsto, el lunes habrá un cambio extraordinario de las condiciones meteorológicas». ¿En qué sentido? «En la madrugada del lunes se producirá una profunda ciclogénesis, muy probablemente explosiva, al oeste de Madeira, que estará 24 horas después sobre Lisboa. Producirá vientos muy fuertes del suroeste en la mitad occidental de la penísula, que entre nosotros será del sureste». 

Con este fenómeno adverso «en la mitad occidental peninsular se darán chubascos y tormentas muy fuertes, con rachas de viento huracanadas. La temperatura en la Meseta norte subirá 10 grados ó más en 24 horas, entre las madrugadas del lunes y martes. En el País Vasco también habrá un cambio similar». Martín prevé que el lunes «la mayor precipitación se dará en la vertiente mediterránea, en la Llanada y Rioja Alavesa».

Todo indica que, como apunta Joseba Areitio, «se presentan días interesantes» y que la cuenta atrás para el invierno ha comenzado y, por de pronto, veremos si se cumple el dicho de que «por San Andrés -30 de noviembre-, hielo en los pies».

Lo que es evidente es que los aficionados a la meteorología están de enhorabuena, atentos a los distintos modelos de predicción. Modelos que, por cierto, varían y por eso suele ocurrir que los pronósticos no coincidan. «Eso es fruto de que cada uno consulta modelos distintos o, incluso, el mismo modelo a distinta hora», aclara Areitio. «Aemet, por ejemplo, utiliza el modelo europeo... Los pobres tiramos del gratuito GFS», añade.