Las negociaciones entre la Real Sociedad y los representantes de Carlos Martínez y Alberto de la Bella han limado buena parte de las diferencias importantes que ha habido en ambos casos y, si el proceso sigue como hasta hora, ambos renovarán en breve por al menos tres años. Los dos laterales titulares acaban contrato en junio del 2011 y desde el 1 de enero pueden firmar por cualquier equipo, por lo que el objetivo de la Real es cerrar su renovación en diciembre.

El acuerdo más cercano ahora es el de Carlos Martínez. Aunque en algún momento las peticiones realizadas por su representante iban en contra de las condiciones en las que han firmado sus contratos todos los canteranos de una similar edad y nivel y se había complicado el tema, la voluntad clara de renovar del jugador ha permitido encauzar la negociación.

Carlos Martínez renovará sin esperar al 1 de enero y hará justicia a lo que la Real ha hecho por él. A pesar de ser navarro, se ha formado en la cantera de Zubieta desde que tenía 14 años y ahora tiene 24. En los últimos días se le ha situado en la órbita de Athletic y Osasuna, pero el de Lodosa tenía que demostrar su agradecimiento al club que le ha hecho futbolista y persona y le ha dado la oportunidad de jugar en Primera. Además, la Real aceptó el año pasado que renovara sólo por una campaña porque le interesaba por un problema que tenía con su anterior representante, con el que había firmado un contrato hasta entonces. Quería romper con él y que le representara Miguel Ángel Cermeño y por eso sólo quiso renovar por un año, cuando la Real pretendía firmarle dos.

Entonces Carlos Martínez no había jugado nada con Martín Lasarte y, a pesar de la confianza que se tenía en él, se accedió a renovarle sólo por una temporada para hacerle un favor. En este año ha pasado de no jugar nada en Segunda a ser titular indiscutible en Primera y su cotización se ha incrementado y no sería justo con la Real aprovecharlo para irse. Además el jugador está contento en Donostia.

De la Bella, tema encauzado

Más diferencias hay con Alberto de la Bella, pero la renovación está encauzada. Su representante se descolgó con una petición muy alta que superaba los parámetros marcados por la Real y hacía temer por el acuerdo, pero la negociación ha entrado en un proceso de acercamiento de posturas que, si no hay problemas de última hora, desembocará en un acuerdo porque el jugador ha visto con buenos ojos la última oferta recibida.

De la Bella, que cumple el jueves 25 años, llegó la pasada temporada a la Real tras pasar sin cuajar por las canteras de Espanyol, Villarreal y Sevilla. Tuvo un mal comienzo en Donostia, pero a mitad de temporada experimentó una gran mejoría que le ha llevado a ser un jugador básico y a ser renovado.