Las fuertes nevadas y las bajas temperaturas a lo largo del centro y el norte de Europa siguieron causando el día de ayer grandes dificultades en el transporte aéreo, en las carreteras y en los ferrocarriles.

Por ejemplo, los vuelos desde el aeropuerto Charles de Gaulle de París, fueron suspendidos; los autobuses en la capital francesa fueron detenidos y se cerró al público la Torre Eiffel.

París reportó un nivel récord de nieve, al registrar una capa de 11 centímetros de hielo cubriendo el suelo, lo cual no había ocurrido desde 1987, de acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional de ese Estado.

Asimismo sufrieron retrasos importantes por las bajas temperaturas los vuelos desde Países Bajos, Alemania y Suiza.

La nevadas caídas en Alemania obligaron también provocaron un caos en las carreteras del país, bloqueadas también por el hielo formado repentinamente.

La mayoría de líneas ferroviarias entre las principales ciudades europeas fueron cancelados.

En Escocia, las autopistas se mantenían aún ayer cubiertas de nieve con cientos de automóviles abandonados por sus propietarios.