La Policía Municipal de Bilbo inicia su campaña de Navidad persiguiendo a vendedores
El Consistorio bilbaino anunció que hasta el 10 de enero desplegará a más de 400 policías municipales para reforzar la seguridad en las calles, cuya primera manifestación es la persecución de la venta ambulante.Agustín GOIKOETXEA | BILBO
Tras una semana en la que se han sucedido noticias relacionadas con la seguridad ciudadana, como el ataque sexista a una menor en Errekalde y un supuesto ajuste de cuentas en el Casco Viejo con una katana de por medio, el concejal delegado Eduardo Maiz reunió a los medios de comunicación para dar a conocer datos sobre «una campaña de control de armas blancas» y el operativo especial de la Policía Municipal para las fiestas navideñas.
El edil jeltzale, que «adornó» su comparecencia con una exhibición de la Unidad Canina, no aportó información sobre aumento de la vigilancia de patrullas en barrios periféricos y «puntos negros» de la villa. En cuanto a los nuevos pasos dados en la ya renombrada «guerra al navajero» del equipo de Azkuna, se limitó a comentar que, en una semana, los agentes han efectuado «casi una cuarentena de identificaciones entre nacionales y extranjeros, con una decena de incautaciones de armas blancas», entre las que se encuentran navajas de una longitud menor a 11 centímetros. «Pensamos que está yendo bien y vamos a seguir con ello, para que el número de incidentes sea el mínimo posible», aventuró.
El despliegue policial previsto hasta el 10 de enero se centrará en las zonas comerciales y de ocio, con más de 400 agentes, entre los que estarán 34 aspirantes en prácticas. El objetivo que persiguen, manifestó Maiz, es que se produzcan el menor número de robos y hurtos a los ciudadanos y a los comercios, en días como el Mercado de Santo Tomás, los desfiles de Olentzero y Reyes Magos, o en el resto de las jornadas que se incrementan las aglomeraciones con motivo de las fiestas.
Por el momento, la única manifestación evidente del dispositivo municipal es la intensificación de la persecución contra las personas que tratan de ganarse la vida mediante la venta ambulante. Varios ciudadanos se han puesto en contacto con GARA para denunciar los métodos empleados por la Policía a las órdenes de Eduardo Maiz, que han llegado a perseguir e identificar a personas por el mero hecho de transportar bolsas y maquetes y ser negro o indígena.