Javi Martínez tendrá la oportunidad de alcanzar mañana en el partido ante el Espanyol una de esas cifras redondas que adornan las trayectorias. El navarro, de 22 años, cumplirá 150 partidos en Primera División, una cifra que le hace sentirse «súper orgulloso y sobre todo de hacerlo con la camiseta del Athletic». Como suele ocurrir en esas ocasiones, el rojiblanco mencionó que la cantidad le asusta un poco y lógicamente desea y espera que «sean muchos más».

El, como el resto de jugadores del Athletic, está deseando pasar página de su última actuación en el terreno de juego. Para olvidar cuanto antes su paso por Anoeta, nada como una victoria en San Mamés. De conseguirlo, sería el quinto triunfo consecutivo en La Catedral.

Todavía ayer, en la rueda de prensa posterior al entrenamiento, el navarro admitía que en Donostia dejaron pasar una buena oportunidad para acceder a los puestos que desembocan en competición continental y el partido ante el equipo catalán puede llevarles por el buen camino.

No obstante está bastante contento con la trayectoria del equipo rojiblanco en lo que va de temporada: «A pesar de ese tropiezo, la temporada está siendo positiva y estar a estas alturas peleando por Europa es bueno. Nos falta dar ese pasito para afianzarnos ahí, pero estamos preparados para darlo».

Javi Martínez espera resarcirse de la derrota de la pasada jornada frente a la Real ganando mañana a otro equipo blanquiazul al que el centrocampista navarro no ha dudado en calificar como la auténtica revelación en lo que va de campeonato.

Cuartos en la clasificación de Primera, el Espanyol mantiene la ilusión por verse la próxima temporada jugando en competiciones europeas tras la gran racha que llevan hasta ahora.

El centrocampista de Allegi de paso analizó al rival que según él «juega muy directo cuando los medios centro encuentran el balón buscando las diagonales de Verdú y Luis García».

La semana más dura

Por su parte, su compañero Markel Susaeta expresó también sus ganas de que llegue cuanto antes la cita ante el Espanyol después de una semana que calificó de dura y difícil.

«Puede que haya sido la semana más dura -en referencia a esta temporada-. El equipo salió muy dolido de Anoeta, pero hay que pasar página. El domingo -por mañana- nos espera un partido difícil, pero bonito ante un gran equipo», manifestó.

El centrocampista eibartarra definió a la plantilla que dirige Mauricio Pochettino como un grupo de «gente joven con chispa y mucha calidad».