Iker Muniain, una de las apariciones más fulgurantes en el fútbol de Euskal Herria de los últimos tiempos, se hará este domingo mayor de edad consolidado como titular en el Athletic Club y ya con 50 partidos disputados con el equipo rojiblanco.

El jugador navarro fue todo un impacto en el verano de 2009, convirtiéndose en un jugador clave para que el Athletic superase las primeras rondas de la entonces Intertoto, en fechas habituales de pretemporada, aún con 16 años de edad, lo que le convirtió en el jugador más joven en vestir la camiseta del primer equipo rojiblanco.

Además, con un tanto en Valladolid en la sexta jornada de Liga, se convirtió también en el futbolista más precoz en marcar en Primera División. Lo hizo con 16 años, 9 meses y 15 días.

Esa sorprendente aparición estuvo acompañada de la importancia que adquirió en el conjunto vasco, con el que jugó 35 partidos, 26 de Liga y 9 de Liga Europa, a pesar de participar en el Mundial sub'17. Este año lleva 14, 13 de Liga y 1 de Copa, y, si juega en Valencia, algo prácticamente seguro, alcanzará su partido 50 con el Athletic.

Después de una trayectoria tan veloz, este curso pareció estancarse, ya que lo comenzó siendo una de las primeras opciones de banquillo para su técnico, Joaquín Caparrós. No obstante, en las últimas jornadas el utrerano le ha abierto las puertas de la titularidad, preferentemente de interior izquierdo, aunque también ha jugado como segundo delantero o, durante fases de los partidos, en la banda derecha.

Preguntado ayer en sala de prensa por esa consagración tan precoz, con su habitual desparpajo, Muniain apuntó que, lo esperase o no, ha trabajado para ello y se han dado las circunstancias para que ocurra. «No se si me lo esperaba o no, pero he luchado, he trabajado por ello y se han dado las circunstancias de que esté aquí con apenas 17 años. Y estoy muy contento por ello», apuntó, deseando «celebrar» sus 18 años de edad con un día de antelación ganando al Levante en el Ciutat de Valencia.

El segundo año

En estos casos de un impacto tan repentino, suele suceder que la segunda temporada suele hacerse muy cuesta arriba por las expectativas creadas, pero el iruindarra no la ve más complicada que la primera, sino «igual». No obstante, asumió que, «los rivales te van conociendo más conforme van pasando los partidos. Estudian tus virtudes, pero tú también mejoras y sabes sus puntos débiles», reparó, adelantando que, aunque no está «obsesionado» con ello tiene ganas ya de marcar un gol en este curso. El año pasado logró 6, 4 en Liga y 2 en Europa League.

«Claro que me gustaría marcar, pero tampoco me obsesiona, aunque algún día alguno pagará los platos rotos, me imagino», advirtió.

De cara el encuentro de mañana, Muniain avisó de que el Athletic lo acometerá «con muchas ganas de acabar con la mala racha» de cinco derrotas seguidas a domicilio. «Esperamos acabar con ella y que sea cuanto antes porque en casa estamos muy bien, ganando los últimos cinco partidos seguidos, que es algo super complicado, y ahora lo que nos falta es una victoria fuera si queremos estar ahí arriba en la pelea por entrar en Europa. Tenemos que ganar fuera como sea», apuntó, deseando que su equipo dé «un saltito adelante» en la tabla que, considera, le «vendría de maravilla».

«Las cosas por ahí arriba están bastante apretadas, y equipos como el Sevilla están pasando una mala racha y perdiendo puntos. Con una victoria subes bastantes puestos», declaró en referencia a sus posibilidades de alcanzar puestos UEFA.