Gbagbo rechaza entregar el poder a Ouattara a cambio de inmunidad
El presidente saliente de Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, rechazó nuevamente la petición de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) y la Unión Africana (UA) de que entregue el poder de forma pacífica a Alassane Ouattara, vencedor en los comicios presidenciales de noviembre, a pesar de que se le ofreció inmunidad. La oferta suponía el último intento de convencer a Gbagbo y evitar la guerra civil.GARA | ABIDJAN
La delegación de dirigentes africanos de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) y la Unión Africana (UA) volvió ayer a Abidjan, capital económica de Costa de Marfil, con el objetivo de ofrecer a Laurent Gbagbo un acuerdo para que abandone el Palacio Presidencial y entregue en poder a Alassane Ouattara, y que volvió a rechazar.
La misión africana tenía previsto ofrecer al presidente saliente marfileño, inmunidad y la protección de sus bienes materiales a cambio de su retirada y de que deje el poder en manos de Ouattara, según una información a la que tuvo acceso la cadena británica BBC y fue recogida por Efe. En caso contrario, amenazan con una intervención militar liderada por ambos organismos. El portavoz de Gbagbo, Ohoupa Sessegnon, respondió a la BBC que la región entera «ardería» si los países de África Occidental envían tropas a Costa de Marfil.
Un alto cargo de la CEDEAO, que pidió que no se revelara su identidad, señaló a Efe antes de la reunión que había indicios de que Gbagbo «podría aceptar una dimisión, a cambio de garantías de que no será procesado por violaciones de los derechos humanos o delitos similares cuando deje el poder» y de conservar sus cuentas en el extranjero ahora bloqueadas, al menos en EEUU y la Unión Europea, así como de que sus principales partidarios «tengan un lugar en el nuevo Gobierno» de Ouattara, agregó la fuente.
Sin embargo, Gbagbo volvió a negarse a renunciar a pesar de que la predisposición de la CEDEAO de otorgarle «amnistía» por su renuencia a abandonar el cargo, agregó la misma fuente de la CEDEAO.
Último intento
El grupo de enviados está formado por el primer ministro de Kenia, Raila Odinga (por parte de la Unión Africana), y por los presidentes de Benin, Yayi Boni; Cabo Verde, Pedro Pires, y Sierra Leona, Ernest Koroma, (por parte de la CEDEAO) y su oferta sería el último intento, previo al uso de la fuerza militar, de convencer a Gbagbo de que ceda pacíficamente el poder a Ouattara, según responsables de la CEDEAO.
El presidente de turno nigeriano de este organismo, Goodluck Jonathan, según medios locales nigerianos, indicó este fin de semana que, tras esta visita, la CEDEAO adoptará una decisión definitiva sobre que hacer en Costa de Marfil, para lo que ya están preparados los planes militares de intervención.
«Gbagbo tiene que dejar el poder o enfrentarse al uso de la fuerza legítima. Sabemos quién ganó las elecciones en Costa de Marfil (Ouattara) y hemos trazado una línea que no se puede superar. Lo que no es negociable es el hecho de que Gbagbo se tiene que ir», señaló ayer el portavoz de la CEDEAO, Sunny Ugoh.
Koroma señaló que esta visita «será la última» para intentar convencer a Gbagbo de que acepte una salida pacífica.
Por lo tanto, la CEDEAO deberá ahora decidir sobre el próximo paso, después de que la misión a Abidjan haya informado a Jonathan, probablemente hoy.
Los líderes militares de la región completaron los detalles de una posible intervención contra Gbagbo durante una reunión de dos días celebrada la semana pasada en Abuya, la capital federal nigeriana, confirmó Ugoh a Efe. «El plan (militar) está listo, sólo queda activarlo», aseveró el funcionario.
Mientras tanto, el presidente electo, Alassane Ouattara, se encuentra custodiado por tropas de Naciones Unidas en un hotel de Abidjan, que ha convertido en su cuartel general. La delegación africana se reunió con Ouattara al término del encuentro con Laurent Gbagbo, del que todos los participantes salieron muy sonrientes aunque no hubo declaraciones sobre su contenido.
El presidente de la Comisión Electoral Independiente (CEI) marfileña, Yussuf Bakayoko, aseguró, en sus primeras declaraciones desde las elecciones presidenciales del 28 de noviembre, que el candidato opositor y ex primer ministro Alassane Ouattara fue «bien elegido con el 54,10% de los votos». «Insisto y reafirmo que Alassane Ouattara fue bien elegido», aseguró Bakayoko, ex ministro de Exteriores de Laurent Gbagbo y máximo responsable de este organismo desde marzo de 2010, en declaraciones al diario francés «Le Parisien» y recogidas por Europa Press.
«Nadie en Costa de Marfil, ni siquiera el Consejo Constitucional, ha puesto en duda estas cifras de la CEI, que han sido certificadas por el secretario general de la ONU», añadió. Desde los acuerdos de paz de Pretoria de 2005, advirtió, «la ONU tiene la última palabra y su palabra está por encima de la del Consejo Constitucional».
A su juicio, la decisión del Consejo Constitucional de proclamar la victoria de Gbagbo ha «soprepasado» sus competencias, limitadas a «validar los resultados proclamados por el CEI o, si considera que ha habido fraude, anular el escrutinio en su conjunto y convocar nuevas elecciones». En lugar de eso, el Consejo únicamente anuló «los resultados de siete regiones favorables a Ouattara», denunció.
Respecto a las críticas contra el CEI por haber anunciado los resultados en el Hotel Golf, cuartel general de los rivales de Gbagbo, su presidente afirmó que la televisión había sido «invadida por militares y policías» y recordó que el portavoz de la CEI, Yacouba Bamba, había sido agredido el 30 de noviembre y no se le había permitido anunciar los resultados provisionales. GARA
Washington está dispuesto a «considerar» acoger en Estados Unidos a Laurent Gbagbo, previa solicitud, para ayudar a poner fin a la crisis de Costa de Marfil, señaló ayer un funcionario estadounidense.